Conforme la invasión rusa en Ucrania entra ya en su segundo año y la guerra fría entre EU y China se intensifica, es interesante ver cómo otros países comienzan a ajustar sus políticas de seguridad. Son cambios relativos, muchas veces imperceptibles cuando suceden de manera aislada, sin embargo, en concierto y con contexto, dicen mucho sobre el reacomodo de la geopolítica mundial.
La semana pasada, el 4 de abril, Finlandia se convirtió oficialmente en el miembro #31 de la OTAN. Se espera que la integración de las fuerzas militares finlandesas al sistema de mando y control de la OTAN sea muy sencilla, gracias a que formaba parte de un programa llamado "Iniciativa de Interoperabilidad".
Este programa establece conexiones entre la OTAN y países que no son miembros que permite que establezcan sistemas y procesos que facilitan la cooperación. Australia, Georgia, Jordania, Ucrania y Suecia también son integrantes de la iniciativa.
La adhesión de Finlandia duplica la frontera terrestre que tiene Rusia con la OTAN, pero la alianza no sólo gana territorio desde dónde reforzar el flanco noreste, también gana un aliado con una fuerza militar significativa, tecnológicamente avanzada y con resentimiento histórico en contra de Moscú.
Finlandia fue invadida por la Unión Soviética en noviembre de 1939. En esa época, Moscú temía que Finlandia fuera usada por Alemania para atacar la ciudad de Leningrado (hoy San Petersburgo). En ese tiempo, Helsinki no era miembro de alianza alguna, pero aun así logró detener a las fuerzas soviéticas durante meses, en la Guerra de Invierno. En 1940, firmó el Tratado de Moscú en el que cedió 11% de su territorio a la URSS.
Junto a Finlandia, Suecia solicitó su adhesión a la OTAN en mayo de 2022, pero permanece a la espera de que Turquía la acepte. Bajo las normas de la OTAN, todos los países miembros deben aprobar la entrada de nuevos aliados. Ankara requiere que Estocolmo implemente reformas para perseguir las redes de financiamiento del Partido de Trabajadores de Kurdistán.
El secretario general de la OTAN, confía que Suecia será admitida formalmente en julio. Esta "fe" emana de las encuestas que ponen al principal rival político del presidente turco Erdogan, a Kemal Kiliçdaroglu, 12 puntos arriba en las próximas elecciones del 14 de mayo. Kiliçdaroglu anunció que, de ganar la Presidencia, levantará el veto político a Suecia para unirse a la OTAN.
En Norteamérica, México, Canadá y EU llevaron a cabo el ejercicio naval NAMSI PACEX 2023. Pese a la retórica política actual, la Semar mantiene un lazo de cooperación con sus socios, ambos miembros de la OTAN. Estos ejercicios sirven para facilitar la cooperación entre las fuerzas navales. Vale la pena que las FFAA mexicanas exploren opciones para subir su capacidad de interoperabilidad, así, en el momento que la resistencia política se desvanezca, México tenga opción de integrarse formalmente al bando geopolítico de los países democráticos libres.
POR IÑIGO GUEVARA MOYANO
DIRECTOR DE LA COMPAÑÍA DE INTELIGENCIA JANES Y ACADÉMICO VISITANTE DEL ATLANTIC COUNCIL, EN WASHINGTON, D.C.
LSN