Hoy en día, no sorprende considerar a la salud mental como un aspecto fundamental de nuestro bienestar general. A menudo, nos enfocamos en cuidar nuestro cuerpo físico, pero descuidamos nuestro bienestar emocional. Sin embargo, la salud mental es igualmente importante y merece la misma atención y cuidado.
De acuerdo con la más reciente edición de Ipsos Global Advisor, el 84% de los mexicanos reconocen la importancia de la salud mental, aunque perciben que los sistemas de salud no le dan la misma importancia que a la salud física. La salud mental abarca nuestro estado emocional, psicológico y social, desde cómo nos sentimos con nosotros mismos, cómo manejamos el estrés y cómo nos relacionamos con los demás hasta cómo enfrentamos los desafíos de la vida.
Es importante reconocer que la salud mental no es solo la ausencia de padecimientos diagnosticados ya que se ha observado que, incluso las personas que no tienen un diagnóstico de enfermedad mental pueden enfrentar desafíos en su salud psíquica. El estrés, la ansiedad, la depresión y otros problemas emocionales son comunes en nuestra sociedad actual.
Según la última edición de Global Advisor de Ipsos, en México, 6 de cada 10 personas han enfrentado situaciones de estrés recurrentes que han afectado su vida cotidiana y les ha generado la sensación de no poder lidiar con las situaciones del día a día.
El estrés es un fenómeno común en nuestras vidas y puede tener tanto efectos positivos como negativos. En pequeñas dosis, el estrés puede ser beneficioso, ya que nos ayuda a mantenernos alerta y responder adecuadamente a situaciones desafiantes. Sin embargo, cuando el estrés se vuelve crónico o abrumador, puede tener un impacto negativo en nuestra salud física y mental, manifestándose en síntomas como dolores de cabeza, problemas digestivos, trastornos del sueño y debilitamiento del sistema inmunológico. También puede tener un impacto en nuestra salud mental, contribuyendo al desarrollo de trastornos como la ansiedad y la depresión.
Es relevante que el sistema de salud integre la salud mental al modelo de atención y no solo se enfoque en el tratamiento de las manifestaciones físicas de los trastornos emocionales. El sistema de salud debe reconocer y atender la salud mental de manera equivalente a la salud física, proporcionando herramientas y recursos para que las personas puedan manejar el estrés de manera efectiva. Además, es fundamental que estas políticas se implementen de manera integral y se involucren a múltiples sectores de la sociedad, incluidos el gobierno, los profesionales de la salud, las organizaciones de la sociedad civil, las empresas y la comunidad en general.
Cuidar nuestra salud mental nos permite vivir una vida plena y satisfactoria. Priorizar el autocuidado, mantener una rutina saludable, cultivar relaciones significativas, buscar ayuda profesional cuando sea necesario y practicar la autocompasión son estrategias clave para mantener una buena salud mental. Recuerda que tu salud mental es tan importante como tu salud física, y merece la misma atención y cuidado.
POR FERNANDO ÁLVAREZ
SENIOR GROUP DIRECTOR
IPSOS EN MÉXICO
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