Asociados aparecen los conflictos de interés político- económicos en las obras de infraestructura y las obras capricho. Es un encuentro propicio para la corrupción de unos y otros, y luego la impunidad de unos y de los otros también. La falta de transparencia, la discrecionalidad, la deshonestidad y el sentirse superiores e intocables por poder o por dinero, hacen de estas prácticas algo cotidiano. Decepcionante es la falta de responsabilidad y de verdad, pero en tanto el incentivo de aprovecharse y salir impunes sea mayor que la sanción, el vicio estará ahí y sin embargo, no hay discurso que pueda justificarlo.
POR SALVADOR CERÓN
ECONOMISTA
@ACCRESPONSABLE
dza