COLUMNA INVITADA

“Las verdades de ayer son mentiras hoy”

Es un hecho, los gobiernos y sus titulares no están a la altura de las expectativas democráticas de los ciudadanos

OPINIÓN

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Óscar Sandoval / Colaborador / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

La democracia es el tablero de la política. Sucede en México, pero también a nivel global. Pese a gobiernos, gobernantes y políticos, y, aunque muchas de sus acciones no cambien, estamos transitando -a pesar de ellos- por un periodo de profundas modificaciones en lo económico, social y político.

Un deseo no cumplido, en este caso la democracia y sus resultados, es semillero de sorpresas que está agarrando desprevenidos hasta a los más experimentados y las democracias más sólidas.

Es un hecho, los gobiernos y sus titulares no están a la altura de las expectativas democráticas de los ciudadanos: 81% de la población considera que la democracia es importante, pero solo la mitad (53%) perciben que hay democracia en su país.

Así lo señala el Índice de “Percepción de la Democracia 2021” de Latana y Alliance of Democracies, realizado online a nivel global entre el 24 de febrero y el 14 de abril de 2021 a 53 mil 194 personas de 53 países (alrededor de mil cuestionarios por país); el 75% de la población global está representada.

Lo más relevante son los cambios en las percepciones entre 2020 y 2021. ¿Qué pasa en el caso de México? ¿La pandemia caerá como “anillo al dedo” a la democracia en el mediano plazo?

Lo obvio: tenemos un déficit en percepción de democracia. Ocupamos el lugar 31 de 53 países con un diferencial de 30 entre la opinión de que nuestro país es democrático y qué tan importante consideramos a la democracia.

Entre 2020 y 2021 aumentó en 4 puntos la percepción de que deseamos que incremente en nuestro país. Ojo, la percepción de que el Gobierno de México actúa en beneficio de una minoría aumentó en tres puntos porcentuales, preocupa porque entre más se actúe por una minoría, no importa si son los ricos o los pobres, menos democrático es un país.

La frontera de la democracia no son las urnas y menos un Instituto Nacional Electoral desgastado por tener origen en la política, no realmente en los ciudadanos, y la desconfianza provocada por la politización de las decisiones.

Las otras perspectivas (que no “otros datos”) que hay que sumar es que mientras a nivel global las personas son más críticas en sus expresiones en redes sociales, en México ha disminuido en 7 puntos. Mientras tanto, el “deseo de mayor regulación para las redes sociales” cayó en 10 puntos. La censura disfrazada de transparencia tiene consecuencias.

Vivimos en un país en el que, desde el poder, les ha pasado a todos, se cree que las decisiones en aras del “poder” en “nombre del pueblo” no desgastan.

En uno en el que el ciudadano que luchó y convenció a un país para ser presidente extraña su calidad de “ciudadano” y en la comodidad de una #Mañanera y en la inequidad propia de ser el mexicano más conocido, hace “una denuncia como ciudadano” a pesar de ser Jefe de Estado. “Politiquiería” lo llamaría si siguiese siendo oposición y tendría razón. Las verdades de ayer son mentiras hoy.

¿Seguirá siendo ese nuestro destino? La brújula está en el voto más allá de lo gracioso que “fosofo fosofo” suene o si se llama Evelyn, Félix o Juanita.

¿Quién dijo contenidos? #TVAzteca rompiendo ratings de audiencia y además nombrando a Sandra Smester como Directora General de Contenido, lo que se suma a su responsabilidad y resultados como Vicepresidenta Ejecutiva de Programación de Azteca Uno. Hay que estar atentos porque la cifra récord de 40.5% de rating en horario estelar es solo referencia de lo que viene. #Enhorabuena.

Por ÓSCAR SANDOVAL
CONSULTOR, SOCIO DE 27 PIVOT
OSANDOVALSAENZ@27PIVOT.COM
@OSANDOVALSAENZ

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