En comunidades cercanas al Nevado de Toluca, como Zinacantepec, las bajas temperaturas los han orillado a encender fogones y encimarse todas las cobijas que puedan por las noches. El clima frío también ha traído enfermedades a la población.
La primera nevada que cayó en el coloso fue el 7 de enero, donde el termómetro registró cifras por debajo de cero. Desde entonces, el clima frío no cede.
Además, las heladas imperaron en 22 de los 32 estados del país y al menos este lunes y martes en la zona norte-oriente permanecerá una masa polar, ante el Frente Frío número 28. En suelo mexiquense, 126 mil personas de 30 municipios están expuestos a las bajas temperaturas.
Yesenia Álvarez, madre de familia y ama de casa en Raíces, Zinacantepec, mencionó que este año sintieron que las temperaturas descendieron más que en otros, tanto que en su casa sus pequeños se han enfermado y tienen que encender fuego.
“El frío nos está pegando lo triple que otros años, lo único que hacemos es prender las fogatas, pero también a raíz de eso nos estamos enfermando; en la cama de mis niñas tengo hasta 10 cobijas”, contó.
En la escuela, algunos maestros no quieren recibir a los alumnos porque están enfermos y les han pedido a los padres que les hagan pruebas rápidas para la detección de COVID cada semana.
Algunos padres de familia lamentaron que les estén pidiendo pruebas rápidas porque los módulos estatales cerraron y ahora todas tienen que hacerse en laboratorios privados con costo de entre 300 y hasta mil pesos, recursos que no tienen por ser de escasos recursos.
En otros hogares, todo el día tienen encendido el fogón, como en el de María Félix Velázquez, donde toman té de hojas para poder mantenerse calientes.
Saben que es peligroso tener la lumbre encendida, pero es la única forma que encontraron de sobrevivir a las bajas temperaturas.
CAR