El presidente Andrés Manuel López Obrador criticó desde la mañanera las actitudes “injerencistas”, “prepotentes” y “metiches” de tres países: Estados Unidos, Austria y Rusia.
En el primer caso, reprochó la postura del secretario de Estado de EU, Antony Blinken, quien lamentó la situación de vulnerabilidad de los periodistas mexicanos.
“Yo creo que está mal informado, porque de lo contrario estaría actuando de mala fe. Lo que él está sosteniendo no es cierto. Desde luego, es muy lamentable que haya asesinatos de periodistas, ya lo sabemos, nada más que en todos los casos se está actuando”, expuso.
Incluso, instruyó al canciller Marcelo Ebrard mandarle a Blinken una relación de todos los casos que se investigan y cuestionó que los gobiernos de EU tengan la mala costumbre de opinar sobre la situación de otros países: son candil de la calle y oscuridad de la casa.
Respecto al conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, dijo que su gobierno es partidario de la paz y del diálogo, sobre todo que actúen de manera responsable las potencias, las naciones hegemónicas.
“Que ya se abandone para siempre la costumbre del intervencionismo y de las invasiones, y que siempre se haga valer el principio juarista, de que, entre los individuos como entre las naciones el respeto al derecho ajeno es la paz. A veces se les olvida a gobernantes del extranjero y andan de metiches”, dijo.
El presidente también criticó al gobierno de Austria, quien negó el retorno del Penacho de Moctezuma, incluso reclamó el trato que recibió su esposa Beatriz Gutiérrez, cuando trató el tema, pues aseguró que fue muy “desagradable”.
“Nosotros estamos en una campaña para que nos devuelvan todo lo que se han robado de arte y de cultura que pertenece a México.
“Fue muy desagradable este encuentro que sostuvo Beatriz con el presidente Alexander Van der Bellen, se sienten los dueños del penacho, apenas se estaba tratando el tema y ya decían que no, fue una actitud muy arrogante y prepotente”, expuso.
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