Un ladrón que huía a pie por las calles de Guadalajara portando un sable samurái, murió tras ser atropellado por su víctima, a quien había asaltado minutos antes y que harto de la inseguridad que se vive día a día, tomó la decisión de hacer justicia por su propia mano.
Los hechos ocurrieron la tarde del lunes 19 de abril en las calles de la colonia Jardines del Country perteneciente al municipio de Guadalajara cuando el malhechor asaltó una barbería establecida en el cruce de la calle Enrique Díaz de León y la Av. Circunvalación.
Existen dos versiones de lo sucedido en el establecimiento, sin embargo, no se ha esclarecido qué fue realmente lo que sucedió; en una versión se dice que el asaltante asaltaba regularmente con una espada samurái, objeto con el que habría agredido a su víctima para despojarla de sus pertenencias, mientras que se circula otra versión en la que se asegura que el ladrón huía con el sable debido a que formaba parte de los objetos robados que obtuvo tras asaltar la barbería.
Tras el asalto, el ladrón huyó a pie y la víctima decidió iniciar la búsqueda del delincuente por lo que abordó su camioneta para tratar de darle alcance al hombre, de quien no se reveló su identidad, fue en el cruce de las calles La Perpetua y Paseo Oriente cuando localizó al asaltante y lo atropelló con su vehículo.
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El delincuente quedó prensado entre el vehículo de su víctima y una camioneta de modelo atrasado que se encontraba estacionada en el lugar.
Tras estos hechos, arribaron al lugar los servicios de emergencia quienes nada pudieron para salvar la vida del asaltante y murió en el sitio, mientras que la víctima paso a ser victimario y fue puesto a disposición de las autoridades correspondientes para determinar si situación jurídica.
CBC