Faltaban unos cuantos días para que Marilyn de Fátima Mena Irigoyen cumpliera 34 años, a ella la muerte la visitó desde muy pequeña; cuando apenas tenía 7 años su padre falleció y comenzó la historia de esfuerzo y esperanza de su familia, la cual quedó a cargo de su madre.
Una mujer recta, justa, muy amable, risueña, cariñosa, de esas personas que si algo no les parece, lo dicen, así era Marilyn, amante de los animales, catlover de corazón y apasionada de la saga de Harry Potter.
No le gustaba que nada le fuese “regalado” ella peleaba por lo que quería hasta obtenerlo, muy joven se separó de su familia para poder vivir con su tía y cursar la secundaria, cuenta Cinthia, su prima; Mari era de ese tipo de gente a la que las relaciones sociales les viene de naturaleza, siempre muy popular y hasta un poquito vanidosa.
Su pelo impecable, sus cejas en perfecta forma, su piel tersa y sin impurezas, de joven sufrió acné, así que regresar a él no era opción. Para poder costear sus estudios tuvo muchos trabajos, desde mesera hasta auxiliar contable en su natal Mérida, Yucatán.
Llegó a la universidad para convertirse en una excelente contadora, ella no se quedaba con lo que los libros o los maestros decían, siempre iba un paso adelante; logró tomar muchos diplomados, sus compañeros la buscan para que les ayudará con algunos temas o a resolver sus dudas.
Marilyn brilló en la crisis
Logró entrar al mundo laboral e independizarse, tener su departamento con sus cosas, fue creciendo hasta que la pandemia por covid-19 la dejó fuera de la empresa para la que servía, pero esto no la hundió, todo lo contrario, comenzó a trabajar por su cuenta, llevando las cuestiones contables de médicos principalmente, su ingreso era hasta superior al anterior, hacía viajes de trabajo: su carrera prosperaba a pesar de la crisis.
Era la mejor cocinera, su destreza en este arte era admirada por muchos en su familia, Cin recuerda que la lasaña era el platillo en el que se lucía, aunque en general las pastas le quedaban deliciosas, la comida japonesa, el sushi, era su mayor gusto gastronómico.
Amor vs. humillación
En la Universidad Autónoma de Yucatán, Marilyn se enamoró, conoció a Ricardo, un sujeto que a decir de su familia siempre se comportó como un patán, a pesar de que “todo el mundo” sabía que eran pareja, él lo negaba.
“…la negaba rotundamente por no ser ‘de la misma clase social’. No la consideraba suficiente para él… a solas sí eran novios, pero ante la gente no, así comenzó todo.”, cuenta Cinthya, prima hermana de Marilyn.
A la familia no le gustaba la relación, “mira como te trata, te humilla”, pero Marilyn estaba enamorada…cegada de quien alardeaba de tener un hermano muy poderoso en la política.
Por un tiempo logró conocer a otras personas, alejarse un poco de él, pero a Ricardo no “le pareció que se la quitaran”, volvió a buscarla, esto a pesar de que había contraído matrimonio con otra mujer con quien tuvo un niño.
Él le regaló un iPhone para estar en contacto con ella, pero según la familia, era un instrumento para seguir a Marilyn, pues cada que ella salía, enseguida entraba una llamada, era Ricardo preguntándole dónde estaba y qué hacía.
“Él sabía todo. Investigamos y nos dijeron que con el iPhone, él podía saber todo eso. Con razón se lo dio”.
Tenían muchos problemas, él le daba regalos, pero siempre para mantenerla sumisa, se los reprochaba constantemente, la hacía sentir menos, la humillaba, Cinthia cuenta la existencia de un audio en el que Marilyn en llanto desconsolado habla sobre esta situación en la que era vista como un ser inferior.
Debido a su constante empeño en el trabajo, Marilyn desarrolló una condición de artritis en las manos, para la cual estaba en tratamiento médico y también usaba guantes que le ayudaban a la afección. Uno de los viajes profesionales que hizo a principios de año fue a la ciudad de Monterrey, de donde regresó muy contenta a contarle a su prima cómo le había ido, todo era emoción excepto el frío del norte que a ella, una joven acostumbrada a la cálida Mérida le caló y le dio justo en malestar, esta situación era bien sabida por Ricardo.
¿Dónde está Marilyn?
Fue desde la medianoche del pasado 5 de febrero de 2021 cuando la familia y amigos de la amante de Harry Potter dejaron de saber de ella, era viernes, víspera del fin de semana, el domingo de hecho, había quedado de verse con Cinthia, pero nadie supo de ella.
Para el domingo 7, Ricardo regresó al departamento de Marilyn, sí regresó, porque de acuerdo con el testimonio de los vecinos, él estuvo con la joven el viernes, justo el día que dejó de tener contacto con todos; preguntó por ella y al no tener respuesta llamó a una de las mejores amigas de la joven, cosa que a la familia le parece rara, pues Mari no le había dado el contacto de la chica.
Fue justo esta amiga la que alertó al primo de Marilyn, él a su vez a la mamá y así hasta que todos acudieron al domicilio, pidieron a la casera abrir la puerta, ella no se negó, pero pidió la presencia de la policía.
Ya con los oficiales, la familia entró en el dilema de ¿quién va a entrar?, se optó por el primo de la joven, se procedió a abrir, segundos después se escuchó un alarido: se dio el momento del hallazgo... ahí estaba Marilyn de Fátima en su cuarto, semidesnuda y colgada de su hamaca.
La reacción de Ricardo, al enterarse fue distante y fría, sólo dijo: “gracias por avisarme, pronta resignación a la familia”.
Desde ese momento empezaron las investigaciones, las fotografías, el personal de la Fiscalía estuvo un buen rato en el cuarto de Marilyn con el SEMEFO, relata Cinthia, se llevaron el cuerpo, no pasó ni una hora cuando se informó que la necropsia ya había sido realizada, “en menos de 24 horas el cuerpo estaba listo”, recuerda.
“Nos informaron que no había rastros de violencia, ni de haber tenido relaciones sexuales, nada. Nos dicen que no le pudieron hacer el examen toxicológico porque su sangre estaba hemolizada y ya no era posible”.
Se informó que la causa de la muerte era “asfixia mecánica por ahorcamiento”, la familia sin entender pregunta a qué se referían, “se suicidó”, dijeron.
Algo está mal
Con el dolor en el ser, la familia procedió a los servicios funerarios, pero con la conciencia de que Marilyn jamás se hubiera suicidado “¿por qué lo haría?”, ella era muy vanidosa, jamás dejaría que alguien la viera así, además tenía un umbral del dolor “muy pequeñito” relata su prima.
Cynthia decidió hacer un hilo en Twitter para que se difundiera el caso, luego de ello la Fiscalía aceptó a que la familia tuviera acceso a las fotos de la escena del crimen, pero no coincidía lo que se veía en ellas con lo que vio su hermano.
En los reportes se dice que no había marcas de violencia, pero en las fotos se le ven moretones al cuerpo en las piernas, en el brazo, el labio ensangrentado y las manos, esas que le dolían mucho, estaban lastimadas “con los dedos 'moretados 'como si la hubieran estrujado” se describe por Cin.
En el lugar había restos como de una pequeña reunión, dos platos, dos vasos, dos latas de refresco “un panorama muy diferente” al que la Fiscalía le pintó a la familia. El caso no se clasificó como feminicidio, pero para quienes aman a Marilyn este dictamen es increíble.
Ahora, gracias a la presión mediática, se ha dictaminado hacer otro peritaje, pero los gastos correrán a cargo de la madre y la familia de Marilyn, en redes sociales se ha comenzado una campaña para poder reunir la cantidad.
El de Marilyn de Fátima Mena Irigoyen fue un feminicidio.
Por: Paola Sánchez Castro
Edición: María José Serrano Carbajal
Diseño: Ana Navarro e Ingrid Almaraz
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