Las deudas y quiebras de empresas podrían ser la constante en los próximos meses a causa de la crisis económica generada por la pandemia de Covid-19, se detonaría una gran cantidad de juicios mercantiles para los que no estaría preparado el Poder Judicial, advierten miembros del Capítulo Occidente del Ilustre y Nacional Colegio de Abogados de México, AC.
“Es posible que se venga una cantidad enorme de juicios mercantiles y habría que reflexionar si el Sistema Judicial, si el Poder Judicial Federal está preparado para recibir una cantidad importante de juicios y demandas de concurso mercantil y más en el Tercer Circuito donde no existe la especialización en los Juzgados de Distrito en la materia. El crédito es fundamental, es un motor de la economía, ninguna empresa ni nación puede crecer sin crédito y este se basa en seguridad jurídica y confianza”, subrayó el jurista Alberto Ruvalcaba.
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El Covid-19 trae al sector empresarial una serie de problemas especialmente de liquidez para mantenerse activas, ya que tienen que cargar principalmente con la nómina de los trabajadores y compromisos impositivos que la autoridad federal no ha aligerado.
“Esta crisis de liquidez se puede ver aliviada con diferimientos, este impulso al crédito y a la credibilidad de las empresas, el proveedor que siga confiando en sus clientes Quien honre sus obligaciones de pago con los acreedores seguramente será quien se recupere más rápido de la crisis. Esta crisis tiene una característica: el impacto ha sido profundo por su velocidad, por el freno a la economía, pero también es una crisis de confianza”, añadió el abogado Aldo Raziel Carrillo Valdez.
Por su parte, Marco Antonio Peña advierte que las empresas están cayendo en estado de insolvencia porque los pagos fijos están ahogando la liquidez.
“Una de las ventajas de la antigua Ley de Quiebras y Suspensión de Pagos era que desde el momento de su declaración se hacía una suspensión genérica a los pagos. Hoy por hoy estamos sufriendo en la pandemia la imposibilidad fáctica de hacer pagos incluso a los trabajadores, porque ahogan al comerciante ante la falta de movimiento empresarial, falta de operaciones y tener que hacer pagos a proveedores y trabajadores, ha generado el estado de insolvencia”.
Por Adriana Luna
GB