A través de sus cuentas oficiales Enrique Alfaro Ramírez, Gobernador del Estado de Jalisco manifestó su postura sobre el caso de acoso sexual que sufrió Diana, servidora pública de Tototlán por parte de dos de sus compañeros.
El mandatario expresó que este delito no quedará impune, pues ni Diana ni ninguna otra persona deben ser víctimas del director de Padrón y Licencias, Efraín Martínez, así como del presidente municipal Sergio Quezada.
Dijo que los agresores no representan los principios y valores de su proyecto político. “No basta una disculpa, se necesita una sanción ejemplar. No merecen ser servidores públicos, ya no tienen nada que estar haciendo ahí. No es un juego, es un delito y se tiene que pagar”, puntualizó.
Además ofreció acompañamiento jurídico y psicológico y aclaró que personalmente les dara seguimiento a las denuncias, hasta llegar a las últimas consecuencias, también enfatizó en la valentía de la víctima que alzo la voz por ella y todas las mujeres que han sufrido este problema. “El acoso sexual no es piropo y está lejos de ser halago; es una agresión, es hostigamiento y tiene que parar”.
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Agregó que se está realizando una ruta de trabajo junto al Congreso del Estado de Jalisco, las dependencias del Gobierno de Jalisco y partidos políticos para endurecer y agilizar las acciones contra la violencia hacia las mujeres.
“Y no nos vamos a detener. La Secretaría de @IgualdadJalisco convocará a cada uno de los 125 municipios de Jalisco a iniciar con un proceso formativo para identificar, prevenir y erradicar las distintas modalidades de la violencia de género en contra de las mujeres”, escribió en una de sus publicaciones.
GB