El Ayuntamiento de Tijuana instaló hoy un módulo de atención para los migrantes centroamericanos, haitianos y mexicanos que montaron un campamento en la garita El Chaparral-San Ysidro, en busca de asilo político.
Ante la critica situación en que se encuentran cerca de 500 migrantes, hombres, mujeres y niños, la alcaldesa Karla Ruíz MacFarland, instruyó al personal a su cargo del DIF, Bienestar Social y Registro Civil, para dar ayuda a estas familias.
Te podría interesar
Magaly Ronquillo Palacios, oficial del Registro Civil Municipal, informó que en el cruce peatonal conocido como “PedWest”, se está dando el servicio de actas de nacimiento para los hijos de las familias migrantes.
Hasta el momento se han registrado a quince menores que no tenían acta y que es indispensable para que ellos tengan certeza jurídica, indicó.
Por su parte, José Luis Pérez Canchola, director del Instituto Municipal de Atención al Migrante, señaló que se están otorgando, además, constancias de identidad para los migrantes, asesoría legal para los inmigrantes nacionales y extranjeros, en términos de derechos y responsabilidades.
“Solo en la parte de la identificación estamos atendiendo a 60 migrantes diarios, se hace énfasis en la orientación para los extranjeros, sobre todo los centroamericanos que son la mayoría”, expuso el ex procurador de los derechos humanos en Baja California.
Informó que se les ofrecen los beneficios de la “Bolsa de Trabajo” para migrantes y gestión para el regreso seguro de aquellos que quieran volver a sus lugares de origen.
Este jueves se cumplió una semana que alrededor de 500 migrantes instalaron este campamento improvisado, por el anuncio que hizo el gobierno de Estados Unidos que el viernes 19 empezaban a recibir a los que estaban solicitando refugio, dijo.
Esa fue la confusión, la gente se concentró acá en el Chaparral, aunque ya se están dando cuenta que no tienen futuro aquí, porque todos los trámites son por la via electrónica a través del sitio conecta.acnur.org , recordó.
La mayoría de los migrantes centroamericanos llegaron en las Caravanas Migrantes de 2018 y 2019, pero ante el cierre de la frontera norteamericana, se quedaron varados en Tijuana.
Después Estados Unidos pidió a México convertirse en un “tercer país seguro” para los aspirantes a asilo político y luego llegó la pandemia que los obligó a permanecer más tiempo en Tijuana, donde muchos ya trabajan en comercios y maquiladoras.
Por Atahualpa Garibay