El laboratorio de Pfizer informó esta mañana que su vacuna para controlar el Covid-19 tiene una efectividad del 95 por ciento. Aunque aún falta revelar más resultados preliminares en varias partes del mundo, esto da una esperanza a nivel mundial. Sin embargo, aún está presente el reto para transportar este nuevo fármaco.
La vacuna de Pfizer requiere estar conservada por debajo de -70° C, una temperatura similar a la que se encuentra en la Antártida y es mucho menor que la que cualquier congelador común, lo cual dificultará el almacenamiento y distribución de las vacunas a varios países.
Al respecto, Filipe Reis, director Regional de Aeropuertos, Pasajeros, Carga y Seguridad para las Américas de la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA), explicó que se está trabajando para que los aviones cuenten con el equipamiento necesario que les permita distribuir la vacuna de Covid-19.
Así lo dijo en entrevista con Sergio Sarmiento y Guadalupe Juárez, donde explicó que la dosis posiblemente necesitaría ser transportada en hielo seco, sin embargo, esta materia representa un gran reto pues cuando se empieza a descongelar suelta dióxido de carbono, un elemento peligroso dentro de las aeronaves.
Te podría interesar
Hoy en día no hay una unidad de hielo seco tan grande que se supone que es necesaria para transportar la vacuna, entonces muchos de la cadena química y los mismos transportistas están tratando de recrear mecanismos.
La IATA emitió una guía de recomendaciones para gobiernos y todos aquellos que intervengan en la cadena de suministro y de logística del reparto de vacunas para el coronavirus.
En este desplegado solicita a los destinos tener instalaciones con control de temperatura, así como equipos y personal entrenado para gestionar mercancía sensible. Destacó que para que todo el plan funcione los gobiernos deben restablecer la conectividad aérea que tenían previo a la pandemia, el cual incluye 22 mil enlaces entre ciudades.