Las autoridades de China presumieron, el pasado lunes, su avión J-15, también conocido como "tiburón volador", con el cual simularon un ataque a la isla de Taiwán. Durante los primeros días de abril, estos cazas cruzaron la llamada línea de identificación de defensa aérea de Taipéi por primera vez, esto luego de que la presidenta taiwanesa, Tsai Ing-wen, se reuniera en Los Ángeles con el presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Kevin McCarthy.
De acuerdo con medios locales, el J-15 es uno de los cazas más avanzados del Ejército Popular de Liberación y será la primera arma aérea que usará Beijing para lograr por la fuerza la "recuperación" de Taiwán.
Así es el tiburón volador que acecha a Taiwán
El J-15 se diferencia del resto de cazas más avanzados de China porque en la punta del estabilizador vertical tiene el logo de un tiburón volador, una seña de identidad de una aeronave, la cual es capaz de transportar misiles balísticos y que puede desplegarse desde cualquiera de los tres portaaviones que Pekín tiene en funcionamiento.
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Este avión de combate está inspirado por completo en un prototipo sin terminar del Su-33, una aeronave rusa. De acuerdo con el Instituto Internacional de Investigación para la Paz de Estocolmo, China copió varios sistemas de armas rusos sin permiso, según un informe de 2017, por lo que el J-15 es una copia sin licencia del Su-33.
Ambos aviones tienen dimensiones idénticas. El J-15 mide 21.9 metros de largo, 5.9 metros de altura y tiene una envergadura de 14.7 metros, según Military Today. Lo único que los hace diferentes son los motores; el tiburón volador opera con el WS-10 de fabricación china, mientras que el Su-33 usa el Saturn AL-31.
Además, el J-15 tiene motores de poca potencia, puede transportar más armas y combustible, por lo que es capaz de volar más alto y más rápido. No obstante, los portaaviones de China limitan las ventajas del J-15 y únicamente mencionan que la aeronave utiliza sistemas de lanzamiento de despegue corto asistidos por saltos de esquí en lugar de catapulta.
¿Qué pasa entre China y Taiwán?
Taiwán y China han sido países separados desde hace más de siete décadas, luego de una intensa guerra civil en la que los nacionalistas derrotados huyeron a Taipei. Taiwán pasó de un gobierno autoritario a una democracia en la década de 1990 y ahora está clasificada como una de las jurisdicciones más libres de Asia.
Sin embargo, el gobernante Partido Comunista de China reclama la isla como parte de su territorio, y en los últimos años, el líder chino Xi Jinping ha comentado sus intenciones de unir nuevamente a Taiwán como parte del territorio de China, para lo cual no duda en usar la fuerza si es necesario.
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