Bien dicen que el crimen no paga, y aunque es un dicho popular, varios ejemplos de la vida diaria lo ilustran a la perfección, tal es el caso de un ladrón que entró a robar a una tienda de electrodomésticos, sin imaginar que su acto tendría devastadoras consecuencias, al menos para él, pues el encargado del negocio repelió el robo a balazos y al escapar se encontró con otra “sorpresa”. Los hechos ocurrieron en el municipio de Jamundí, Colombia.
El asunto no terminó con los disparos al asaltante, el hombre amante de lo ajeno intentó huir del sitio que previamente robó, sin imaginar que los vecinos del lugar se habían dado cuenta de su fechoría. Hartos de la delincuencia, detuvieron al ladrón, que viajaba a bordo de una motocicleta y lo golpearon, estuvieron a punto de lincharlo, pero la policía lo salvó.
Ambas acciones fueron captadas en video, el asalto quedó grabado por la cámara de seguridad del negocio de electrodomésticos. En la grabación se ve al hombre llegar en su motocicleta y estacionarse afuera del local. Entra como si nada, empuja el mostrador con su cuerpo al tiempo que desenfunda su pistola y se dirige a la parte de atrás del sitio, saliendo del ángulo de la cámara.
Segundos después sale de la tienda apuntando a su víctima y rápidamente se sube a su moto para huir, pero el encargado saca una pistola y le dispara, el sujeto reacciona e intercambian disparos. El empleado sale del local para seguir al asaltante y una mujer va detrás, terminando así la grabación.
Otra grabación muestra lo que ocurrió después con el ladrón, pues en ella se puede ver al hombre golpeado en el suelo, junto a su motocicleta derribada. El hombre ya está esposado, pero continúa alegando en el piso, mientras un policía intenta ponerlo de pie. Cabe resaltar que su rostro está ensangrentado, producto de los golpes que recibió. Las autoridades determinaron que ni el asaltante, ni el comerciante resultaron heridos como producto de su enfrentamiento a balazos.
DMGS
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