Un grupo de policías de una comisaría en Tennessee, Estados Unidos, están envueltos en un escándalo al ser despedidos por haber sido descubiertos cuando participaban en "juegos eróticos". La denuncia se centró en siete uniformados, que incluye a una mujer casada identificada como Maegan Hall, quien es señalada de presuntamente haber tenido relaciones íntimas con otros seis policías.
Los siete policías son señalados de enviar fotografías eróticas entre ellos, además de haber organizado una fiesta en un jacuzzi, e incluso haber tenido encuentros íntimos dentro de la estación de policía en la ciudad de La Vergne ubicada en en el condado de Rutherford, según reportó el medio local WTVF TV. Tras una investigación interna, los siete uniformados fueron encontrados culpables y fueron castigados.
Las autoridades locales decidieron despedir tanto a la policía Maegan Hall como al sargento Lewis Powell, así como al oficial Juan Lugo, el sargento Ty McGowan y al detective Seneca Shields. Mientras que el resto de los dos policías acusados, Patrick Magliocco y Larry Holladay, solo recibieron una suspensión, pero no fueron cesados de la corporación.
Tras una denuncia realizada al alcalde
La conducta de los siete policías de Tennessee fue denunciada directamente en las oficinas del alcalde de La Vergne, Jason Cole, quien se enteró que la oficial Hall tenía relaciones íntimas con varios de sus compañeros y mantenía una relación abierta con su compañero Magliocco y su esposa, situación que fue confirmada por el policía al asegurar que había tenido relaciones con su compañera en repetidas ocasiones.
El sargento Powell quien en un inicio negó que tuviera algún vínculo con sus demás compañeros en los juegos sexuales, finalmente confesó su participación luego de que su esposa se enteró de los “rumores” por lo que tuvieron un episodio de violencia doméstica donde el sargento declaró: “me golpearon, lo más probable es que pierda a sus hijos”.
Sin embargo, los hombres acusados han señalado a la oficial de policía de tener conductas “impropias” al cuestionar su salud mental además de su “consumo excesivo de alcohol”. El policía Patrick Magliocco quien fue el que sostuvo la afirmación, agregó que un día, la oficial Hall tomó una arma de cargo vacía y se la apuntó contra la sien, con el propósito de escuchar cómo sonaba el gatillo.
En una de las fiestas en un bote, Maegan Hall era obligada por el patrullero Magliocco a beber vodka mientras estaba en una bañera de hidromasaje, en ese momento se desató la parte de arriba del traje de baño de la mujer, por lo que los otros policías invitados la auxiliaron a cubrirse y “protegerla”, según la investigación del caso.
Los acusados fueron sancionados por realizar “actividad sexual durante el trabajo, acoso sexual, conducta impropia de un oficial y mentir durante el curso de la investigación”, señaló el director de recursos humanos, Andrew Patton.
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RMG