Un estudiante de la Universidad de Missouri sufrió una severa lesión cerebral después de verse obligado a beber una botella de vodka durante una fiesta.
Se trató de Daniel Santulli, quien recién retornó a su hogar luego de haber permanecido meses internado por una broma pesada que cambió su vida. El joven de 19 años fue víctima de la que es considerada por su abogado, David Bianchi “la peor novatada de la historia''.
Los hechos ocurrieron en una fiesta de la hermandad Phi Gamma Delta en la que el estudiante debía "presentar sus compromisos" a sus "hermanos". Miembros de la hermandad le colocaron a Santulli un tubo en la boca y lo obligaron a beber una botella de vodka entera y cerveza.
Luego de esto, el joven fue encontrado dentro de un automóvil, había sufrido un paro, por lo que fue llevado por sus compañeros al Hospital Universitario. Los médicos pudieron reanimarlo, sin embargo, las consecuencias fueron lamentables e irreversibles: perdió la vista, quedó mudo e incapaz de moverse.
El nivel de alcohol que tenía en sangre era del 0.468%, es decir, 6 veces más del límite legal en Estados Unidos. En el hospital le diagnosticaron que había sufrido “un daño cerebral masivo”.
Familiares y amigos del joven demandaron a la fraternidad y a 22 personas por el incidente, pero hasta el momento, nadie se ha hecho cargo de la novatada. Por ahora, la institución académica les prohibió a los implicados la entrada al campus.
Según el abogado de Santulli, hay 2 nuevos identificados entre los acusados: Samuel Gandhi y Alec Wetzler; el primero organizó la fiesta y supuestamente obligó al joven a tomar toda esa cantidad de alcohol; mientras que el segundo vio al estudiante en el piso, con los labios azules y no hizo nada por ayudarlo.
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