Pese a que la idea parece ser sacada de una película de ciencia ficción; una empresa estadounidense especializada en genética informó este lunes que busca ser la primera en incursionar en la "desextinción" de especies animales.
Así como lo lees, esta compañía estadounidense se ha planteado la misión de "recuperar" al mamut lanudo extinto hace miles de años, con la finalidad combatir el cambio climático y "sanar" de cierto modo la Tierra.
De nombre “Colossal”, esta compañía cofundada por los empresarios y científicos Ben Lamm y George Church, ya ha recaudado 15 millones de dólares para dar inicio a su ambicioso proyecto el cual pretende crear un "híbrido elefante-mamut" que sea capaz de sobrevivir en el Ártico.
"Nunca antes ha podido la humanidad aprovechar el poder de esta tecnología para reconstruir ecosistemas, sanar nuestra Tierra y preservar su futuro a través de la repoblación de animales extintos", indicó Lamm, fundador de conocidas empresas como Hypergiant y que es consejero delegado de Colossal, por medio de un comunicado.
Millones de especies en peligro de extinción
La empresa de genética, destacó que su intención es ayudar a prevenir el cambio climático y recordó que, según cifras de la Organización de Naciones Unidas (ONU), más de un millón de especies de animales, plantas y hongos están en peligro de extinción.
Es ante este riesgo que en las próximas décadas y a medida que las especies desaparezcan los ecosistemas dependientes empezarán a "colapsar", afectando indudablemente la salud y los medios de subsistencia humanos.
Ante ello el objetivo de Colossal, es generar un método de "conservación disruptiva" mediante el cual se llevaría a sustitutos de "especies extinguidas y esenciales" a sus hábitats originales.
Lo anterior con la idea de ayudar a "restaurar ecosistemas perdidos con potencial para frenar e incluso revertir los efectos del cambio climático".
Es bajo estos argumentos que la empresa pretende crear un híbrido de elefante-mamut con características únicas que le ayuden a sobrevivir en condiciones extremas con el objetivo potencial de revitalizar los prados árticos.
Con información de EFE