#PANDEMIA

Europa, entre luz y sombras

Con una vacuna, en Hungría tienen acceso al "certificado de protección". En otros países siguen protestas por las restricciones

MUNDO

·
CON VÍA LIBRE.Tarjeta de inmunidad COVID-19 emitida por gobierno en Budapest.Créditos: AP

Estadios sin limitaciones de aforo ni mascarillas, interiores de bares y restaurantes llenos, museos y cines reabrieron sus puertas. Hungría inició su nueva normalidad, que aplica sólo a quienes tengan un certificado de vacunación, pero en otros países de Europa siguen las protestas por confinamientos y detenciones por las fiestas clandestinas. 

El denominado "certificado de protección" está en el centro de un gran plan para regresar a la normalidad. También ha despertado críticas porque, argumentan, da una falsa sensación de seguridad y resulta discriminatorio.

El gobierno húngaro ha aliviado las restricciones cuando lidera la vacunación en la Unión Europea (UE), con 48 por ciento de la población adulta del país de casi 10 millones de habitantes con al menos una primera dosis. 22.6 por ciento con las dos.

Quienes hayan recibido al menos la primera dosis o los que se hayan curado del COVID-19 pueden acceder a una tarjeta tipo carnet llamada "certificado de protección", que abre las puertas al regreso a la normalidad.

Hungría fue el primer país comunitario que empezó a utilizar vacunas no autorizadas por la Unión Europea (UE), como la china Sinopharm y la rusa Sputnik V.

Para algunos expertos en sanidad los alivios se han anunciado de forma apresurada, ya que en el país, que durante semanas ha sido el que ha tenido la mayor tasa de mortalidad de la UE, todavía hay muchos fallecimientos por COVID, 101 en las últimas 24 horas.

Mientras, la Policía belga detuvo a 132 personas que participaron en una fiesta ilegal en un parque de Bruselas para protestar por las restricciones del COVID-19.

También, más de 400 personas participaron el sábado por la noche en otra macrofiesta cerca de Dijon (Francia), a la que los gendarmes pusieron fin deteniendo al presunto organizador. 

En tanto, en Wuhan, China, organizaron un festival de música con 11 mil asistentes, muchos de ellos sin mascarilla, un año después de que la ciudad origen del coronavirus finalizara un severo confinamiento. Dos días duró el recital de música Strawberry.

Con información de EFE, AFP y AP