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Hombre llena bola de boliche con CENIZAS de su padre y logra JUEGO perfecto: VIDEO VIRAL

"No puedo expresar lo que significa esta noche para mí", escribió el emocionado jugador

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John Hinkle logró un juego perfecto al usar la bola de boliche con las cenizas de su padre.FOTO: EspecialCréditos: FOTO: Especial

Un hombre que adquirió el gusto por jugar bolos debido a que veía a su papá hacerlo cuando era un niño, le rindió un increíble tributo al conseguir un juego perfecto anotando 300 puntos con una bola que tenía dentro las cenizas de su padre.

El pasado 12 de abril, John Hinkle Jr se preparó para empezar uno de los juegos de boliche más importantes de su vida.  No disputaba ningún título ni tenía que vencer a algún rival. La competencia era con él mismo y para lograr algo que su padre siempre intentó pero nunca alcanzó: un juego perfecto. 

John Jr usó una bola que había sido llenada de manera personalizada con las cenizas de su padre. Lo acompañaba su hermano Joe en Peoria, Illinois. 

Antes del juego, John le prometió a su hermano que conseguiría un juego perfecto con esa bola. 

"Estaba hablando con mi hermano y le dije: 'Voy a conseguir un 300 (puntos) con esta bola'", dijo a medios locales. "Y Joe dijo 'Hazlo'", agregó el emocionado jugador. 

El hombre de 39 años que ha sido dos veces campeón de bolos de la NCAA (Asociación nacional de atletas colegiados) lo había decretado. Tras varias rondas de tiros, su objetivo estaba más cerca. 

Fue así como en una publicación de Facebook, John Hinkle Jr describió el momento:

"Tenía lágrimas en los ojos en los tiros 11 y 12. No podría decirte a dónde fue la última bola, tenía tantas lágrimas al lanzarla".

El video de la hazaña fue recuperado medios locales, aquí te lo compartimos:

Inmediatamente después de su racha de 12 strikes, John describió el momento como "noche épica".

"No puedo expresar lo que significa esta noche para mí", escribió.

Su padre nunca logró un juego perfecto

El jugador de bolos de la División I, admitió que ha tenido varios juegos de 300 puntos en su carrera, pero este en especial significó mucho para él. Su padre, quien lo introdujo a él y a su hermano al deporte, nunca había logrado una puntuación perfecta.

"Es especial. Papá disparó 298, 299, nunca tuvo un 300. Tenía la piel de gallina, escalofríos ", dijo Hinkle.

"Él estaba ahí", dijo John Jr. Por su pate, el hermano Joe también bromeó: "Esto compensa tantas noches al crecer cuando dormíamos en una bolera mientras nuestros padres terminaban la noche de la liga".

CRS