Diana Trujillo es una de las mentes detrás del exitoso amartizaje del "Perseverance", en la quinta y más ambiciosa misión estadounidense al planeta rojo, por la búsqueda de rastros de vida en el cráter Jezero. Ella es una de las directoras del vuelo y desarrolló “las manos” del robot.
Trujillo, de nacionalidad colombiana, llegó a Estados Unidos a los 17 años, sin saber inglés, con sólo 300 dólares, así que empezó a limpiar casas para ahorrar y pagar las colegiaturas.
Vocación
Antes de entrar a la universidad no tenía claro qué estudiar, mostraba cierto amor por las matemáticas; sin embargo, los prejuicios de la época hicieron que tardará más en decidirse y dar el paso.
"Se notaba la diferencia entre las carreras escogidas por los hombres y por las mujeres. Ellos soñaban con estudiar alguna ingeniería, mientras que ellas se impulsaban más por el lado artístico”, declaró al periódico colombiano "El Espectador".
Estudió primero el inglés, en el Miami Dade College, luego ingeniería en la Universidad de Florida, e ingeniería aeroespacial en la Universidad de Maryland.
Durante su carrera fue seleccionada para ser parte del programa de la Academia de la NASA, mientras estudiaba en Maryland, para desempeñarse como gerente de operaciones de la academia en el departamento de educación de la agencia.
En 2007, fue la única latina en alcanzar un puesto ese año en la NASA. Cumplió su sueño, ahora la colombiana aconseja a las niñas ubicar aquello que les gusta hacer de corazón, elaborar un plan para conseguir su meta y luchar por ella.
Incluso, participa en la organización Brooke Owens Fellowship, que se dedica a ayudar a mujeres para que ingresen a las compañías del espacio cuando están en la universidad.
Estrellas, su escape
Diana ha dicho que de pequeña mirar las estrellas era su escape ante la violencia que vivía su país.
Ahora, 23 años después de su llegada a EU desde Cali, Trujillo es una exitosa profesionista de 40 años, jefa del equipo de ingeniería del brazo robótico encargado de recolectar las muestras de la superficie del planeta rojo.
Su equipo integró las partes físicas y de computación del robot, que el 18 de febrero superó los “siete minutos de terror”, en la atmósfera marciana, en los que hace todo solo —sin que se le manden comandos desde la Tierra—.
Trujillo llevó la proeza al mundo hispanoparlante, relató por primera vez en la historia de la NASA, el amartizaje en español, una hazaña por la que luchó durante siete años, casi dos millones de personas siguieron la transmisión por YouTube.
El "Perseverance" fue lanzado en julio de 2020, es considerado “el robot más perfecto” para una misión en el espacio.
Por Alejandra Martínez y Sayuri López
avh