Los niños pueden ser muy traviesos, y muchas veces sus acciones no pasan más allá de algunos momentos divertidos y sonrisas. Sin embargo, para un niño de Florida, el momento de diversión casi se convierte en tragedia, por un pequeño error.
De acuerdo con Telemundo Noticias, Elías Quezada de siete años, estaba jugando y se escondió en un contenedor de basura. Pero minutos más tarde, el camión de la recolección pasó junto a él y levantó el bote llevándolo al interior del camión, donde se comprimen los desechos.
El canal narra que, por suerte, cerca del vehículo se encontraba la abuela del menor quien escuchó unos gritos y pidió al conductor que detuviera los sistemas para que su nieto no fuera triturado. El hombre alcanzó a detener el mecanismo, y de inmediato se pudo observar Elías asomándose entre el camión. Finalmente, lo sacaron y se reunió con su familia, aunque un poco espantado.
"Me levantaron y me arrojaron a donde iba a ser un puré de papas. Estaba pensando que este podría ser el final para mí", afirmó Quezada al canal 8 de Tampa, Florida.
Waldo Fidele, el conductor del vehículo de basura, recibió un nombramiento honorífico por su labor al salvar la vida del menor.
Este no es el primer caso
Antes de Elías, Jake Deates de Kenosha, Wisconsin, tuvo un caso similar, según lo relatado por ABC News. El medio reportó que, en su caso, Deates estaba escondiéndose de su madre, y se metió en una bolsa. Tiempo más tarde, el recolector aventó el “paquete que estaba cubierto de frazadas”.
Jake declaró que creía que era su mamá la que lo estaba cargando, hasta que cayó dentro del camión con el resto de los desperdicios. Ahí comenzó a gritar y el conductor alcanzó a escuchar algunos ruidos, justo a tiempo para detener las aspas de trituración.
acmg