CURIOSIDADES

La hormona del amor, ¿existe?

La ciencia dio detalles sobre la existencia de la oxitocina, una hormona que explica distintas conexiones amorosas.

ESTILO DE VIDA

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Amor, Ciencia, Hormona del amor.Foto: PexelsCréditos: Foto: Especial

El amor viene siendo tema de debate en los últimos meses, ya que se ha puesto en duda la existencia de una hormona con estas características, llevando a pensar que el enamoramiento es algo idealista y sentimental. Es por ello que un reciente informe reveló la existencia de la hormona del amor. Seguí leyendo y conocé qué dice la ciencia sobre ello.

Es que según especialistas, existe una hormona denominada oxitocina, que se encarga de presentarse al momento de enamorarnos, besar, abrazar y también durante el parto. Incluso ha llegado a ser parte de tratamientos para combatir la depresión. Esta hormona del amor es neurotransmisora con múltiples funciones.

Por ejemplo, durante el parto esta hormona del amor provoca las contracciones uterinas necesarias para el nacimiento del bebé y también interviene en la contracción de los conductos galactóforos durante la lactancia. A su vez, se explica la vitalidad a través de situaciones como el aprendizaje y la respuesta frente al estrés.

De acuerdo a la ciencia, la hormona del amor es una molécula producida en el sistema nervioso central, cuya composición es similar a la de las proteínas. La oxitocina está presente en la confianza, la empatía, las relaciones sociales y estados de ánimo. Aunque, tal como se explicó anteriormente, su fuerte es el vínculo entre una madre y sus hijos, al punto tal de demostrarse que las mujeres que amamantan son más felices que aquellas que no lo hacen.

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Esta última característica de la hormona del amor llevó a científicos a que profundizaran las investigaciones, intentando explicar una supuesta explosión de amor cuando se amamanta. Y, en consecuencia, muchos se han preguntado cómo activar la oxitocina de forma natural o artificial. Es por ello que la ciencia elaboró un spray nasal con esta característica para tratar estados depresivos graves, trastornos de espectro autista o síndrome de estrés postraumático.

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