Muchas veces pensamos que los malos hábitos son los más evidentes, como fumar, beber alcohol o no dormir lo suficiente, sin embargo, hay hábitos mucho más dañinos por el simple hecho de que son muy difíciles de identificar; nosotros somos Erre Barre y hoy queremos contarte sobre 5 malos hábitos poco reconocidos pero que seguramente has hecho o haces sin darte cuenta.
La necesidad de quejarse
El quejarse se relaciona con pensamientos negativos, con lo cual condicionamos a nuestro cerebro a ser más pesimista, haciendo que se libere una alta cantidad de cortisol, mejor conocida como la hormona del estrés.
Aunque no lo creas, estos pensamientos negativos conducirán a nuestro cuerpo a un debilitamiento del sistema inmunológico, aumentando la presión arterial e incrementando el riesgo de padecer enfermedades del corazón, diabetes o incluso obesidad.
La zona de comfort
Estar cómodos, en la mayoría de los casos no tendría por qué ser algo malo, el problema es cuando esta sensación de comodidad se convierte en una creencia limitante; hay personas que nunca se atreven a explorar los límites de su visión del mundo por miedo y temor a lo que vayan a encontrar al salir de su zona de confort, si este es tu caso, recuerda que nunca sabrás de lo qué eres capaz si no te atreves a dar los primeros pasos.
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No hacer deporte por no saber lo que quieres
Es muy común asociar palabras con sentimientos negativos, como pasa con las dietas pues se asocian con sacrificio o sufrimiento, y puede que esto te pase al pensar en deporte, sin embargo, es importante no confundir deporte con actividad física, pues es probable que no te guste el box, o la natación, pero sí te guste salir a caminar, bailar, o ir al gimnasio. Te recomendamos probar deportes diferentes como lo es Erre Barre, en donde te divertirás al ritmo de la música mientras trabajas en tonificar tu cuerpo.
La validación externa
¿Alguna vez te has puesto a pensar si realmente haces las cosas por ti, o porque esperas el reconocimiento de los demás? Uno de los mayores errores es buscar la validación de las personas en las acciones que tomamos; si dejas de vivir para los demás y comienzas a vivir para encontrar tu propia plenitud, aprenderás a validar tus propias acciones y emociones, cuando menos te des cuenta, tu vida tomará un rumbo que te traerá muchas y más grandes satisfacciones.
Ser demasiado duro contigo mismo
De vez en cuando es natural sentirse mal con uno mismo, inclusive un poco de autocrítica puede llegar a ser un instrumento positivo, pues nos ayudará a saber qué podemos mejorar en nosotros mismos y tomar acción; sin embargo, hay un tipo de crítica destructiva y es aquella que en lugar de conducirte a cambios positivos, afecta la imagen que tienes de ti mismo, poniendo en duda la confianza de tus capacidades.
El aprender a dialogar con nosotros mismos, nos enseñará a cuidar de nosotros, viendo que somos capaces de entender nuestras fortalezas y debilidades desde una perspectiva madura.
¿Alguno de estos malos hábitos te resultó familiar? ¡No te preocupes!, es mucho más normal de lo que te imaginas, lo importante es identificarlos al momento y ser conscientes que el cambiar esto es un trabajo que requiere de constancia y dedicación, así como cuidar tu alimentación, o tus horas de sueño, pero igual de importantes.
Por: Erre Barre
JLRM