El camino de la plata
Partiendo de Querétaro hacia el norte, siguiendo el camino que, desde el Virreinato, conectaba a la Ciudad de México con las minas de Zacatecas y Durango.
-
Guanajuato
A sólo dos horas de Querétaro, la caprichosa topografía de Guanajuato, sujeta en espíritu y geografía a la voluntad de las montañas, es la primera parada en nuestra aventura minera. Hoy, sus calles, túneles y callejones componen un laberíntico pasaje directo al profundo pasado de nuestro país.
-
Aguascalientes & Zacatecas
Después de hacer una parada en Aguascalientes –y su icónico Museo Nacional de la Muerte– en donde la historia del estado se conserva con el orgullo propio de los tesoros, Zacatecas es quizá el secreto colonial mejor guardado de México. Desértica, minera y revolucionaria, el carácter resuelto de la ciudad carga en la piel la memoria de su pasado.
-
Durango
Tan hermosa como discreta, y protegida por la profundidad del desierto chihuahuense, la ciudad de Durango resplandece entre las montañas de la Sierra Madre Occidental, como los valiosos minerales que se esconden en su interior. La dificultad para alcanzarla le confiere una personalidad única expresada en su sus características arquitectura y cultura culinaria.
Correr junto al mar
Bañadas por el majestuoso oleaje del océano Pacifico e iluminado por sus inolvidables atardeceres multicolor, las selvas, los bosques montañosos y, desde luego, la colección de playas y bahías de la costa occidental trazan un viaje perfecto para todo tipo de aventura.
-
Sayulita
Famoso por las dramáticas olas que atraen surfers de todo el mundo, el compromiso de Sayulita con su identidad bohemia, su espíritu relajado y su inigualable belleza natural es el punto de partida perfecto para un viaje en auto que combina, en partes iguales, aventura y largos trayectos en auto adecuados al tranquilo ritmo de la marea.
-
Mexcatitlán
La pequeña isla que presume ser la cuna de la cultura azteca –y que, en 2020, recuperó su nombramiento de Pueblo Mágico, es un paraíso en donde los colores de la naturaleza y el envidiable clima de la costa nayarita componen el escenario ideal para una escapada de varios días sujetos a la voluntad del entorno y su irresistible invitación a no hacer nada.
-
Mazatlán
De las ballenas que cada invierno visitan sus costas y su romántico malecón animado por los colores del Pacífico, a la irresistible cultura gastronómica alimentada por los sabores del mar (y coronada por el original taco gobernador), Mazatlán reafirma su lugar entre los mejores destinos playeros del país.
-
Huellas mayas
Oculto bajo las profundas selvas de Chiapas, se esconde un camino milenario compuesto por cenotes, lagunas, cascadas y, desde luego, impresionantes sitios arqueológicos.
-
Naha & Metzabok
100 kilómetros al sur de la zona arqueológica de Palenque y sus más de 200 edificios sumergidos en la selva, las lagunas de Naha y Metzabok son la primera parada en un viaje anclado al correr del agua. La mejor manera de explorar la riqueza natural de la zona es en compañía de un guía Lacandón que domine esta tierra.
-
Yaxchilán
A orillas del río Usumacinta, que marca la frontera entre México y Guatemala, Yaxchilán sobrevive entre los árboles y los rugidos de los monos araguatos, esperando a los viajeros que se aventuren a navegar el río –la única manera de acceder al sitio arqueológico– para revelar los secretos que guarda entre toda la naturaleza.
-
Lagunas de Montebello
Antes de llegar a San Cristóbal de las Casas, el expansivo sistema de más de 50 cuerpos de agua pintados naturalmente de turquesa, violeta y esmeralda, merece una visita. Aquí, los días transcurren entre paseos en kayak y largas caminatas por sus senderos delineados por orquídeas y, con suerte, el avistamiento de un jaguar.
De camino hacia la recuperación
Ideando nuevas estrategias para impulsar la recuperación del sector turístico de nuestro país, Airbnb presentó "México por Tierra": una colección de rutas para explorar lugares que, de otra manera, permanecerían escondidos. A través de una nueva alianza con 72 Horas en Imágenes, lanzaron una invitación a un concurso fotográfico para que los viajeros compartan sus recuerdos en estas rutas y puedan ganar hasta mil 500 dólares en cupones para viajar.
Por Domingo Álvarez
avh
