JARDÍN

¿Qué hacer si tengo un limonero con hojas arrugadas?

Lucir un limonero en tu jardín traerá múltiples beneficios, sin embargo también requiere amplios cuidados debido al ataque de una plaga letal denominada minador.

¿Qué hacer si tengo un limonero con hojas arrugadas?
Limonero, Jardín, Minador Foto: Pixabay Foto: Especial

El limonero es considerado como una estrella del jardín ya que potenciará la belleza de las demás plantas gracias a su combinación de amarillos y verdes. Este fruto cítrico puede nacer en cualquier parque, a diferencia de sus otros familiares, como el naranjo por ejemplo. Este noble árbol nos provee de limón, permitiéndonos ahorrar varios pesos en la verdulería y siendo la materia prima de jugos que benefician a la salud, especialmente en las personas que sufren diabetes. Ya sea un limonero tradicional o de las cuatro estaciones, puede sufrir el ataque de una importante plaga llamada minador.

El minador afecta a los cultivos cítricos de cualquier jardín, pero en particular al limonero, generando serios daños en brotes tiernos. En consecuencia, resulta vital cuidar a la planta y protegerla de esta enfermedad debido a que causará que las hojas se arruguen y, posteriormente, adornen el suelo del parque. Por lo tanto la plaga provocará que las hojas que estén brotando del árbol aparezcan arrugadas, con marcas lineales y enroscadas.

Resulta importante saber que cualquier limonero es una tentación para el minador, que pertenece a la familia de las mariposas y constituye una de las enfermedades más dañinas por lo que genera en la planta, causando la pérdida parcial o total del fruto. Si bien la enfermedad afecta a los cítricos, también pueden atentar contra la integridad de otra fruta como el tomate o de la lechuga.

Cada maestro jardinero o cuidador amateur que en su jardín tenga un cítrico de estas características, específicamente un limonero, deberá llevar a cabo una serie de prácticas que servirán para detectar las plagas del minador y así combatirlas con facilidad, teniendo en cuenta que integran una de las enfermedades más complejas de exterminar. Dicha dificultad se debe a que las mariposas, que pueden medir hasta 4 milímetros de longitud y poseen alas plumosas, penetran las hojas y se alimentan de la misma, causando que los pesticidas no la afecten.

Foto: Pixabay

Hay dos técnicas esenciales para evitar que el limonero de tu jardín sea víctima del minador. La primera se refiere a la colocación de una trampa cromática color amarilla, ya que este color atrae al insecto y, en consecuencia, reduce su población. Mientras que la segunda consiste en rociar las hojas del cítrico con una mezcla de aceite de neem y agua, provocando que la savia de la planta sea amarga y no resulte apetecible para la mariposa.

Foto: Pixabay

 

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