Estamos tan cerca de la Navidad que ya comienza a oler a ponche. Las luces ya comienzan a adornar las calles y las casas y todo se ve con más amor, es sin duda una de las celebraciones más esperadas. Si buscas estar en sintonía con las festividades, las Nochebuenas son tu mejor opción, y hoy te diremos cómo sembrarlas con éxito.
La Nochebuena es la flor de la temporada por excelencia, sus colores, principalmente el rojo, la hacen especial para decorar cualquier espacio y llenar del espíritu navideño la casa o trabajo, es por eso que son tan solicitadas para esta época, pero no siempre tenemos tiempo de salir a comprar, además, tener nuestras propias flores siempre será una ventaja.
¿Cómo sembrar nochebuenas en en casa?
Antes de sembrar las plantas de Nochebuena es necesario revisar la temperatura del suelo y el lugar donde se colocará, el cual no debe tener vientos o cambios brucos de temperatura. La temperatura ideal para el crecimiento de esta flor es de 20 a 22 grados centígrados, y durante su floración 18 grados.
La tierra deberá drenarse fácilmente y no ser dura, ya que las raíces de la planta se podría pudrir si se llena de demasiada agua. El lugar para sembrarla debe estar preferentemente con luz durante el día y sombra parcial por las tardes.
Para cultivar la nochebuena sigue estos pasos:
- Humedece la tierra donde planeas cultivar la Nochebuena.
- Haz un pequeño hueco y coloca la planta a una profundidad de 30 a 40 centímetros.
- después toma un poco de la tierra y ponla en el hueco para taparla.
- Riega la nochebuena cada tres días, cuidando siempre de que no se encharque.
Recomendaciones para tener mayor éxito
La tierra siempre deberá estar húmeda, pero no muy mojada, por eso es importante verificar que el suelo de la planta no se sienta seco.
No la riegues desde arriba, pues la echarás a perder. Moja la tierra directamente, procurando distribuir el agua. Cuando llegue el frío, puedes desenterrar la flor del jardín y ponerla en maceta para resguardarlas de los cambios de temperatura. Si ya están en maceta, ubícalas cerca de la ventana donde reciba calor, pero no luz directa.