Dentro del gremio cinematográfico en México existieron decenas de personalidades que se consolidaron por su trabajo en la gran pantalla, y una de ellas fue la primera actriz Josefina Echánove.
La famosa actriz falleció el 29 de diciembre de 2020 a los 92 años, esto en su casa y alejada del espectáculo, pues se sabe que la actriz se había retirado desde el 2010 siendo su última telenovela "Corazón Salvaje" y hasta sus últimos momentos vivió cercana a sus hijas.
Josefina Rojas Huddson nació un 29 de septiembre de 1927 en Guanajuato, su nombre real, tuvo una larga trayectoria en cine y televisión y es recordada por sus papeles en “Santitos”, “Perdita Durango” y “Cabeza de Vaca” e incluso trabajó al lado de grandes leyendas del séptimo arte en la época del Cine de Oro como Emilio “El Indio” Fernández y Gregory Peck.
Los hijos de Josefina Echánove
Josefina Echánove fue madre de la cantante María del Sol, Alonso Echánove y de la periodista Peggy Echánove, siendo esta última quien falleció tan sólo dos meses después de la partida de su progenitora.
Sin embargo, fue su hijo Alonso Echánove quien le hizo pasar complicados momentos a su madre y a sus hermanas debido a que tuvo intensas adicciones en su vida que lo llevarían a su final a pesar de que estuvo en la cima del éxito dentro del gremio actoral.
El hijo de Josefina Echánove que lo perdió todo por sus adicciones
Actualmente Alonso Echánove tiene 66 años, pero ha revelado que cuando tenía tan sólo 14 años de edad consumió drogas por primera vez, dando así inicio a una vida que estaría repleta de adicciones lo que a su vez lo haría distanciarse temporalmente de su familia luego de que su madre lo corrió de la casa al enterarse de lo que consumía.
A pesar de el problema que tenía con la sustancias nocivas, el famoso logró hacerse de una carrera envidiable en la actuación y debutó al lado de su madre en “A fuego lento”, participando además en filmes como “La indomable” o consolidando su carrera al participar en la película “Modelo antiguo” al lado de Silvia Pinal.
Pero mientras más alcanzaba el éxito en su carrera, también aumentaba su intensidad en el mundo de las adicciones, llegando al punto de ser tan dependiente de las drogas que llegó a gastar hasta 60 mil pesos en menos de un mes en sustancias nocivas, lo que lo llevaría a su pérdida total y que incluso haría que le robara su madre y sus hermanas para tener dinero para sus vicios.
Sin embargo, esto no sería lo más grave, pues todo empeoraría aún más debido a que su salud se deterioró rápidamente y sufrió varios infartos cerebrales que lo dejaron paralizado por dos años, además de que padeció preinfartos cardiacos, fractura en piernas y clavículas además de intentos de suicidio.
Actualmente Alonso Echánove está rehabilitado y se dedica a dar clases de actuación en la Universidad de Guanajuato, y se sabe que logró rehabilitarse antes de que su madre falleciera.
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