El cine de oro mexicano ha dejado grandes exponentes a lo largo de los años, uno de ellos, conocido como "Nanche", marcó toda una época al lado de Mario Moreno "Cantinflas", sin pensar que unas décadas después su propia hija se haría un nombre dentro de la industria al lado de grandes íconos como Pedro Armendáriz y Antonio Aguilar.
Eduardo Arozamena Lira, un hombre que comenzó en el espectáculo como cantante, nació un 13 de octubre de 1877 en la Ciudad de México (CDMX) y comenzó a cantar cuando era monaguillo en el coro de una iglesia. Su adiestramiento a corta edad lo llevó a convertirse en barítono desde muy joven y a trabajar para la Compañía de Operetas y Zarzuelas de la hermanas Moriones, un logro que no era nada menospreciado en la época.
Eduardo Arozamena y su exilio a Cuba
El talento del mexicano era innegable, el éxito dentro de la industria fue creciendo conforme se presentaba en obras como "El soldado de chocolate", "La viuda alegre" y "El conde de Luxemburgo". Sin embargo, cuando entró el régimen militar de Victoriano Huerta, Eduardo Arozamena fue exiliado a Cuba, donde formaría parte de los conocidos teatros habaneros.
No fue hasta la década de 1910 que el actor volvería a territorio nacional para incorporarse al cine en importantes producciones como "La soñadora" de 1917, donde además de actuar fungió como directos, argumentista y guionista. A lo largo de su carrera también participó en grandes producciones de Hollywood como "Drácula" de 1931, dirigida por George Melford.
Arozamena también formó parte de cintas como “Martín Garatuza” en 1935; “Almas Rebeldes”, en 1937; y “Los de Abajo”, en 1940, por mencionar algunas. Se codeó con figuras del cine mexicano de la talla de "Cantinflas", Gloria Marín, Jorge Negrete, Luis Aguilar y María Félix.
Su trayectoria, además, lo hizo merecedor de reconocimientos a nivel mundial como la "Palma de Oro" en Guatemala y el Premio Ariel de 1949 por "actor de cuadro" en el filme "Río Escondido".
En cuanto a su vida amorosa, el actor se casó con Clemencia Sánchez, una cantante con la que tuvo seis hijos, siendo Amparo Arozamena, la más pequeña, quien seguiría sus pasos con mayor éxito en la industria al compartir créditos en filmes con figuras como Antonio Aguilar y Pedro Armendáriz.
Eduardo Arozamena fallece el 21 de mayo de 1951, día en que el cine de oro mexicano despidió a uno de sus íconos en compañía de la Asociación Nacional de Actores (ANDA), pues, desde ese entonces, la medalla con la que se homenajea a los actores por una gran trayectoria lleva el nombre de este cantante y actor que consolidó la industria en México.
SEGUIR LEYENDO:
Cantinflas: Este fue el SECRETO que se llevó a la tumba el cómico del Cine de Oro