Alfonso Zayas y Rafael Inclán son dos de los nombres que se relacionan de inmediato como embajadores del famoso cine de ficheras en México. Junto con ellos, Raúl Padilla mejor conocido como "Chóforo" se suma a lista de los actores que no solo compartieron roles en la industria del cine nacional, sino que también los une la sangre que corre por sus venas.
El nombre completo de Alfonso Zayas Inclán revela el parentesco que el originario de Hidalgo comparte con el nacido en Mérida, Yucatán, Rafael Inclán. Ambos actores nacidos en 1941 son familia.
Rafael Inclán es hijo del bailarín de tap, Alfonso Jiménez “El Kilómetro” y de la cantante Gloria Alicia Inclán. Su abuela fue Guadalupe Inclán, reconocida actriz en las carpas de teatro que recorrían el país con espectáculos.
Por su parte, Alfonso Zayas es hijo del músico Alfonso Zayas Zetina y Dolores Inclán, ambos eran parte de las caravanas de las carpas donde la abuela de Rafael Inclán actuaba.
Gloria Alicia Inclán y Dolores Inclán eran hijas de Guadalupe Inclán por lo que Alfonso Zayas y Rafael Inclán son primos hermanos y forman parte del linaje de actores que tienen con su familia.
Alfonso Zayas también tiene un vínculo familiar con el actor fallecido Raúl Padilla “Choforo”, hijo de Lili Inclán y el actor Raúl “Chato” Padilla quien es recordado por su personaje de Jaimito el Cartero en El Chavo del 8. Choforo es primo de Alfonso Zayas por lo que los tres actores comparten lazos familiares por parte de sus madres.
Por lo tanto Alfonso Zayas es sobrino nieto del actor Miguel Inclán (hermano de Lupe Inclán), el famoso villano que actuó como el invidente aprovechado en Los Olvidados (1950) de Luis Buñuel y el adicto que golpea a la mamá de "Pepe el Toro" en Nosotros los Pobres (1948) de Ismael Rodríguez.
Alfonso Zayas comenzó su carrera como jefe de piso en Televicentro hasta llegar a ser el galán del cine de ficheras que sin importar que no fuera guapo y estuviera en cualquier oficio como taxista, albañil o plomero, podía conquistar a las mujeres más atractivas del mundo del cabaret por su gracia y picardía.
RMG
