El tipo de cambio se mantuvo por octava sesión consecutiva por debajo de las 17 unidades, al ubicarse a la venta, en operaciones al mayoreo, en 16.6759 unidades por dólar, según estadísticas del Banco de México.
Ello, ante la apreciación de 0.74 por ciento de la moneda mexicana frente a la divisa estadounidense en la jornada de ayer y alcanzando un nivel no visto desde el 28 de julio del año pasado, que fue de 16.6726 pesos por dólar.
Así, el peso se mantiene como la divisa más apreciada en el año, de la canasta ampliada de principales cruces, con un avance de 1.71 por ciento.
La apreciación del peso está respaldada por el alza del precio del petróleo, lo que impulsó a divisas de economías emergentes y países productores de petróleo, refirió Gabriela Siller Pagaza, directora de Análisis Económico-Financiero de Grupo Financiero Base.
Por su parte, Carlos Serrano Herrara, economista en jefe de BBVA para México, refirió que el buen momento de la moneda mexicana está cerca de terminar, ante un entorno más factible de que Banco de México inicie con el recorte de su tasa de interés referencial.
Al respecto, Arnulfo Rodríguez Hernández, economista Principal de BBVA Research, dijo que la fortaleza del peso se debe a factores de corto y largo plazo, que próximamente registrarán cambios, como es el diferencial de tasas entre México y Estados Unidos.
“La historia del súper peso continúa y obedece a factores de corto y largo plazo. En los de corto hay un alto diferencial de tasas entre México y Estados Unidos, que es de 565 puntos base, también el posicionamiento de los inversionistas, hay un apoyo al peso y otro elemento importante es la evolución tan favorable de las remesas.
“Mientras que los factores de largo plazo tienen que ver con los pilares macroeconómicos de México, como la disciplina fiscal y un manejo prudente de las fuentes externas que no permite que la economía caiga en problemas de desequilibrios externos”, apuntó.
Por Verónica Reynold
veronica.reynold@elheraldodemexico.com
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