El presidente Andrés Manuel López Obrador informó que no fue una expropiación, sino que se recuperó la concesión de los tres tramos de Ferrosur, de Grupo México, para la obra del Tren del Istmo de Tehuantepec y que ahora ocupa la Secretaría de Marina de forma temporal.
Enfatizó que la temporalidad de la medida va a depender de cómo se comporte la empresa de Germán Larrea.
En la conferencia de prensa matutina, aclaró que su gobierno no tiene un pleito personal con Larrea por lo que tampoco tiene relación con la operación de compra de Banamex.
Acusó que Grupo México planteó una indemnización por nueve mil 500 millones de pesos, “así ya no se puede”, dijo.
Incluso reveló que habló con el empresario Germán Larrea sobre el tema antes de que se publicara el decreto, “porque dicen: ‘Se expropió’. ¿Qué se expropia? Lo que es propiedad privada, es muy distinto a recuperar una concesión que es de la nación”, recalcó.
El titular del Ejecutivo Federal dijo que se estaba avanzando en un arreglo, pero cambió la actitud de la empresa.
“Nos dejaron como única opción el derecho de paso porque también dejaron de contestarle las llamadas al secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández”, dijo.
“Nosotros, buscando un acuerdo, les damos el derecho de paso, pero la vía, que es de la nación, va a regresar al dominio de la nación por seguridad nacional y por interés público, y es completamente constitucional y legal”, subrayó.
López Obrador detalló que pospuso un día la publicación del decreto para hablar personalmente con Larrea, ya que era de mal gusto hacerlo el mismo día que asistía a una comida en Palacio Nacional el 16 de mayo.
Relató que al día siguiente desayunaron con los secretarios de Hacienda y Gobernación para exponerle a Larrea que quería la devolución de ese tramo de concesión.
Por el momento, dijo, no se reunirá con el empresario.
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