Ahorrar no siempre es fácil, pero para todas las personas resulta fundamental contar siempre con un dinero extra que permita atender el pago de servicios que requieran altos niveles de liquidez sin que tengas que estar esperando tu próximo pago para poder realizarlo.
Es por eso que la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), en el más reciente número de la Revista del Consumidor, te da unos tips valiosos para que tengas un presupuesto de tus gastos y siempre puedas contar con un ahorro en el cochinito que te permita afrontar gastos como pagos de tarjetas de crédito, colegiaturas, crédito hipotecario, entre otros.
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¿Cómo lograr contar con un ahorro siempre?
Esta forma de ahorrar tiene cierta similitud con el fondo de emergencia, pues ambos representan dinero extra para cubrir un gasto, solo que el fondo de emergencias es para algo inesperado, mientras que este colchón financiero es para gastos que se tengan en el presupuesto. Se recomienda que este dinero se guarde en una cuenta bancaria, separada y de fácil acceso.
De acuerdo con Profeco, estos son los trucos que puedes llevar a cabo para conseguir construirlo.
Haz un presupuesto
Determina cuánto dinero puedes destinar a tu colchón financiero, una regla general es mantener lo suficiente para cubrir entre tres y seis meses de tus gastos más importantes.
Desafío de los cien sobres
Este método te permite ahorrar más de cinco mil pesos en 100 días y consiste en etiquetar 100 sobres con números del 1 al 100, revolverlos, elegir un sobre cada día y guardar la cantidad de dinero etiquetada en el sobre.
Puedes hacerlo en tu cuenta bancaria respetando el número del sobre y transferir la cantidad de fondos que hay en tu cuenta corriente a tu cuenta de ahorro.
Dale preferencia al colchón financiero. Después de cubrir tus gastos fijos y antes de comenzar a gastar en otras cosas, separa el dinero de tu ahorro.
Programa tus ahorros
Configura transferencias automáticas desde tu cuenta corriente a tu cuenta de ahorros cada quincena o mes, así el dinero se acumulará sin que tengas que estar al pendiente de realizarlo.
Divide tus gastos
En diferentes categorías, igual que con tu presupuesto. Puedes guardar tu dinero en sobres con el nombre del gasto que corresponda, como: agua, luz, gas, teléfono, mercado, entre otros.
Invierte tu dinero
Infórmate qué instrumentos dan mejores ganancias y cuáles son los más seguros. Algunos ofrecen transferencias automáticas. Puedes empezar a invertir con poco dinero a través de instituciones financieras, corredores de bolsa, en CETES o en tu Afore. Averigua la opción que más te conviene
Administra tus ingresos
Prueba con la técnica 50-30-20, la cual consiste en dedicar 50 por ciento de tus ingresos a las necesidades o gastos básicos, como renta, pagos de servicios en el hogar, despensa, entre otros; 30 por ciento a gastos prescindibles o deseos, como comer fuera de casa y salir de vacaciones, y 20 por ciento para el ahorro.
Para lo anterior, calcula y ajusta tus ingresos y gastos para alcanzar el porcentaje de ahorro. Si uno de tus objetivos lo excede, ajusta los otros, pero no elimines ninguno, salvo en casos muy necesarios
Recupera tus finanzas
En caso de que hayas pasado por alguna eventualidad, comienza a recuperar el monto lo antes posible para satisfacer tus necesidades si se produce un próximo evento.
