Las Águilas se juegan más que el pase a octavos de final frente al Chicago Fire, entre dudas tras la goleada en Columbus
Como en un juego de pinball, el América se mueve entre convincentes victorias y dolorosos traspiés, sin saber qué esperar. El equipo de André Jardine no termina de amalgamarse y, en el camino, puede cargar con la eliminación en la Leagues Cup.
El rival en turno de las Águilas en los dieciseisavos de final es el Chicago Fire, uno de los equipos más longevos de la MLS, que de la mano del suizo Xherdan Shaqiri, su principal figura, busca sumarse a los clubes de aquel país que eliminan equipos mexicanos.
“El futbol te enseña todos los partidos, todos los días, se juega partido a partido, es siempre muy duro, circunstancial, tienes que estar listo a muchas cosas que puedan pasar en el partido. Siempre hablo con los jugadores de que hay que estar mentalmente preparados para las cosas que no salen bien, cuando no tienes la contundencia, fallas al frente o atrás, y te pones atrás en el marcador”, manifestó el timonel brasileño.
Hay tres antecedentes entre estas dos escuadras, con total dominio azulcrema: 2-1 en 2006 y 2009, además de un 3-2 en 2013. Sin embargo, ninguno de los encuentros anteriores fue en duelo oficial, y el presente azulcrema no es precisamente el mejor.
Reencuentro de partidos
El América inició la etapa de André Jardine con derrota en el Estadio Azteca 1-2 ante Juárez; después vino el duelo aplazado contra Querétaro y la victoria 3-0 sobre Puebla, en el estreno de Julián Quiñones. En Leagues Cup se presentó con un 4-0 sobre St. Louis y una caída 0-4 ante Columbus.
“Nuestro equipo no jugó mal, pero perdimos la concentración, la determinación máxima, y ahí nos quedamos lejos de lo que somos”, agregó Jardine en conferencia de prensa previo al duelo de este viernes.
La última vez que las Águilas recibieron cuatro goles, en un partido oficial, fue en la Jornada 5 del Guardianes 2020, cuando cayeron 4-1 ante Querétaro, en La Corregidora, con Miguel Herrera como técnico. Ni Santiago Solari ni Fernando Ortiz recibieron nunca cuatro tantos.
Apenas hay buenas noticias en medio de la inestabilidad amarilla. Kevin Álvarez, refuerzo a partir de este verano, suma tres partidos al hilo con gol, entre Liga y Leagues Cup. Además, el club capitalino recupera a Diego Valdés, ausente en los dos duelos anteriores por problemas musculares.
Se juegan la reputación
El equipo azulcrema se juega parte de la reputación ante el Chicago Fire. En caso de no avanzar a octavos de final, se puede hablar del primer fracaso en la etapa del técnico Jardine, aunque se trate aún de un proyecto que inicia. Aunque en los equipos grandes, las formas también importan.
dhfm