CULTURA

El arte de Urs Fischer llega a México con una retrospectiva en el Museo Jumex

La exposición incluye una monumental obra dedicada al amor que se quedará un año sobre la explanada del museo ubicado en Polanco

CULTURA

·
El arte de Urs Fischer llega a México con una retrospectiva en el Museo JumexCréditos: Especial

El arte, afirmó el artista austriaco Urs Fischer (1973) “se tiene que dejar ser arte y no obligarlo a ser algo”. Una gigantesca masa informe de diez metros, elaborada de aluminio fundido, acero inoxidable y hoja de oro y que lleva por nombre “The Lovers #2” da la bienvenida a la primera retrospectiva del artista en México y América Latina. El Museo Jumex inaugura este sábado la muestra.

“A menudo las cosa grandes necesitan cosas simples, las cosas monumentales siempre se hacen a pequeña escala, esto empezó con un pequeño movimiento, la imagen está en el movimiento de tu  cuerpo, de tus sentimientos, continuar con él no importa, no es preciado hasta que seleccionas el momento en que empiezas a meterte en algo, los humanos son inteligentes con la suma de algo no en el momento, está escultura es el momento”, explicó en la presentación de su exposición.

Lienzos, esculturas e instalaciones del austriaco integran la exposición que ocupa tres pisos y la explanada principal del museo ubicado en Polanco. En ocasiones, sus piezas podrían parecer desconcertantes: esculturas a escala humana de cera que se van consumiendo como una vela, sillas fragmentadas, máquinas que imitan pequeños gestos humanos o animales, como el movimiento de la cola de un perro o una enorme sala repleta de piezas que penden para imitar la lluvia.

La exposición incluye una monumental obra dedicada al amor (Foto: Especial)

El texto que acompaña “The Lovers”, pieza que también da título a la muestra, da en el clavo: sus obras son “claramente un imán para selfies”. Fisher confesó: “Tengo muchos amigos artistas y trato de entender cómo trabajan, a veces no sé cómo hago cosas cuando trabajo, no sé decir cuál es el proceso de mi trabajo. Ya sea mi mente, el ruido, cuando trabajas con cualquier elemento tienes que crear un equilibrio y dejarlo ir, rendirte, si lo fuerzas no va pasar nada”.

La exposición ha sido curada por Francesco Bonami e incluye el trabajo de Fisher realizado en el último cuarto de siglo; en el recorrido se incluyen piezas elaboradas específicamente para México (también el catálogo y la publicidad callejera ha sido diseñada por él) y piezas procedentes de colecciones públicas y privadas de todo el mundo.

Radicado en Nueva York, Fischer inició su carrera en Suiza; estudió fotografía en la Schule für Gertaltung de Zúrich. Su obra comenzó a mostrarse en Europa a mediados de los años 90 y a Estados Unidos su primera exposición llegó en 2009 para ocupar tres pisos del New Museum de Nueva York.

“El arte también puede ser lo opuesto de lo aburrido, me encanta la música, las películas, las cosas que me dan una emoción directa, inmersiva, pero por otra parte cualquier cosa que hayan visto lo llevas en la mente, sigue ahí, viaja contigo, no sólo en el momento que lo ves, son las experiencias que se quedan dentro de ti, tu mente lo hace a su forma, es como el plutonio que se queda contigo y después sigue liberando cositas en tu mente, en tu existencia, eso es la magia del arte visual, es como un vocabulario”, dijo.

La exposición se quedará un año sobre la explanada del museo ubicado en Polanco (Foto: Especial)

La galería 3 del museo permite conocer las diferentes etapas productivas de Fischer; ahí se exhibe todo un panorama de esculturas y pinturas elaboradas desde la década de los 90; con ellas, el artista anima a poner atención a los detalles (una pequeña gota que cae en un estanque montado en medio de la sala, una lengua que asoma por el hueco de una pared); otras parecen retos a la materialidad como aquella roca que pende en el aire sostenida por una cadena que ahorca a un pequeño pájaro.

En el piso se ubica la pieza reina del selfie: “Melody” (2019), se trata de una enorme instalación de gotas de lluvia, de diferentes colores que penden de toda la sala mientras dos pequeños caracoles mecánicos se deslizan lentamente por el piso.

La monumentalidad empieza a asomar en el primer piso, ahí está una de las obras estrella “Things” (2017), un enorme rinoceronte de aluminio bombardeado por una infinidad de objetos: una caja de pizz, una podadora, una impresora o una maleta de viaje; el artista ha querido hablar de la historia de la humanidad.

“Nunca pensaba mucho en el amor cuando era joven, la pregunta es ¿qué hacemos en la vida y cómo nos relacionamos? Siento que todo se vuelve más claro cuando estás en un lugar donde sientes amor por todo, la vida es mejor”, agregó Fisher. La romántica propuesta artística del artista permanecerá en el Museo Jumex hasta el 18 de septiembre. 

Sigue leyendo:

Ajustan proyecto en Chapultepec, va sin Renzo Piano y sin inversión privada

Conciertos, poesía, arte y actividades infantiles parte de “Octavio Paz de vuelta a San Ildefonso”

Regresa la Compañía Nacional de Danza a Bellas Artes con aforo al 100%