Seguramente te ha pasado más de una vez que llevas todo el día pensando en el añorado momento de que llegue la hora de dormir, pero al meterte a la cama, el sueño desaparece, casi como por obra de magia, o quizás una broma de mal gusto por parte de tu cuerpo.
El reloj avanza y cada vez te angustias más pensando en el tiempo que te queda para descansar antes de un día importante o simplemente para no llegar tarde al trabajo. Terrible, ¿no?
La realidad es que todo el mundo tiene problemas para dormir en algunas ocasiones y la falta de sueño puede afectar tu salud e incluso hacer más difícil sobrellevar el día a día; por ello, aquí te dejamos algunos consejos para que puedas ir a la tierra de Morfeo más rápido y no perder la cabeza en el intento.
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¿Qué pasa si no duermo bien?
Primero lo primero, es importante mencionar que un adulto necesita de siete a ocho horas para estar bien descansado; sin embargo, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), cerca del 40 por ciento de la población mundial sufre de algún tipo de trastorno de sueño.
Aunque esto no quiere decir que todos tengan un problema severo, sí pueden impactar en el estado de ánimo, en la fortaleza del cuerpo y terminar en problemas como ansiedad, o incluso depresión.
Según los expertos, algunas de los trastornos de sueño más comunes son el insomnio o bien despertarse a la mitad de la noche y no poder volver a dormir o somnolencia excesiva durante el día; ¿te ha pasado?
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¿Cómo puedo dormir rápido?
Afortunadamente existen algunos remedios para deshacerte de estos incómodos y hasta peligrosos trastornos. Si sufres para poder conciliar el sueño por la noche, aquí te dejamos algunos tips para combatirlos.
- Elimina pensamientos estresantes: Quizás suena obvio, pero olvidar los problemas del trabajo, con tu pareja o familia ayuda a mantener al cerebro en calma.
- Evita pantallas brillantes: Procura no ver la televisión o celular al menos una hora antes de ir a dormir. Nuestro cerebro interpreta el brillo azul de las pantallas como luz natural y nos hace mantenernos despiertos.
- Cena ligero: Olvídate de cenas grasosas y pesadas o tomar muchos líquidos; tu estómago trabajará demás y necesitarás ir al baño durante la noche.
- No duermas la siesta después de las 3pm: A todos nos da el famoso ‘mal del puerco’ después de comer, pero no lo dejes ganar; si duermes por la tarde, difícilmente tendrás sueño cuando te acuestes.
- Adiós cafeína, nicotina y alcohol: Estos tres ‘amigos’ alteran nuestro ritmo cardíaco y ciclo de sueño; evítalos a toda costa antes de ir a dormir.
Con estos consejos seguramente podrás descansar profundamente si los sigues al pie de la letra, pero ojo, si te pasa seguido, mejor ve a un médico, pues tu salud puede verse afectada.