Juan Barraza Samperio mejor conocida como La Mataviejitas aterrorizó durante un tiempo las calles de la Ciudad de México, asesinando a mujeres de la tercera edad por robarles unos cuantos pesos.
Bajo el techo de la Arena México se vivían los coloridos espectáculos de lucha libre; chiflidos, mentadas, gritos de la gente apoyando a sus rudos o técnicos, sin gran diferencia, simplemente disfrutando de un show del deporte del pancracio. Nadie imaginaría que detrás de una de las luchadoras que se hacía llamar La Dama del Silencio se alojaba una asesina serial.
Juan Barraza Samperio creció en un ambiente familiar de violencia, maltratada por su madre física y psicológicamente, esta mujer creció con un odio que ni ella podría explicar. En declaraciones posteriores a su captura, La Mataviejitas confesó que cuando mataba a sus víctimas, imaginaba que era su madre a la que ahorcaba.
Este caso se mediatizó no sólo porque había declaraciones de ella antes de ser descubierta, sino por ser uno de los primeros que identificaba a una mujer como asesina serial.
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Sus víctimas eran ancianas que vivían solas, se hacía pasar por enfermera y una vez creando confianza las golpeaba con cables, las torturaba hasta estrangularlas y una vez muertas las despojaba de sus pertenencias.
Juan Barraza Samperio fue detenida en 2006 cuando escapaba de una vivienda en la colonia Moctezuma, fue condenada por 16 homicidios.
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mgm