AUSTRALIA

¿Es el fin del mundo? Tormenta de arena "desaparece" ciudad en Australia

Los meteorólogos explicaron que la gran nube de polvo fue causada por una serie de tormentas eléctricas en el norte del estado.

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Fue una escena apocalíptica. Foto: Especial.Créditos: AFP

Como si se tratara del fin del mundo, una gran tormenta de arena se “comió” a la ciudad de Boulia, en el estado australiano de Queensland. El momento justo cuando la gran masa de polvo impactó a la localidad quedó grabado por varios residentes y los videos rápidamente se volvieron virales. De acuerdo con las autoridades, el fenómeno tuvo ráfagas sostenidas de viento de hasta 109 kilómetros por hora.

"Son comunes, pero normalmente pequeñas. La de ayer por la tarde es la más grande que he visto desde que vivo aquí. Me dio un poco de frío", relató uno de los residentes a los medios locales.  Al respecto, los meteorólogos explicaron que la gran nube de polvo fue causada por una serie de tormentas eléctricas en el norte del estado. Las ciudades de Mount Isla, Dajarra y Urandangi también sufrieron afectaciones.

"Lo que sucedió ayer es que tuvimos una larga línea de tormentas que se extendían a lo largo de unos 100 kilómetros. Cualquier tormenta eléctrica emite una salida de aire frío. Debido a que teníamos una línea de tormentas, teníamos una ráfaga frente a todas estas salidas de aire frío trabajando juntas. Así que los residentes habrían experimentado la tormenta de polvo, y luego tormentas eléctricas después de eso", dijo la meteoróloga de la Oficina de Meteorología Helen Kirkup. 

¿Qué son las tormentas de arena?

Las tormentas de arena y polvo suelen ocurrir cuando fuertes vientos arrastran grandes cantidades de arena y polvo de suelos desnudos y secos a la atmósfera. En la última década, los científicos se han dado cuenta de los impactos de estas tormentas en el clima, la salud humana, el medioambiente y muchos sectores socioeconómicos. Los Miembros de la Organización Meteorológica Mundial están a la vanguardia en cuanto a la evaluación de estos impactos y el desarrollo de productos para orientar las políticas de preparación, adaptación y mitigación.

El polvo en suspensión en el aire constituye un grave riesgo para la salud humana. El tamaño de las partículas de polvo es clave al determinar el potencial peligro para la salud. Las partículas de un tamaño superior a 10 µm no se pueden respirar y dañan solo los órganos externos (causan principalmente irritación en la piel y los ojos, conjuntivitis y mayor susceptibilidad a las infecciones oculares). 

Las partículas que se pueden inhalar, aquellas con un tamaño inferior a 10 µm, en general quedan atrapadas en la nariz, boca y la parte superior del tracto respiratorio y se pueden asociar a trastornos respiratorios como el asma, la traqueítis, la neumonía, la rinitis alérgica y la silicosis.

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