A veces, cuando vemos los aparatos que van saliendo al mercado o las máquinas que el gobierno y empresas emplean para realizar ciertos trabajos nos parecen una impresionante obra de la ingeniería moderna; sin embargo, pocos se detienen a pensar en el origen de cada una. Desde que su inventor la concibe en su cabeza y su proceso hasta que queda terminada.
En esta ocasión científicos de la Universidad Metropolitana de Tokio lograron construir un campo acústico en tres dimensiones con el que pudieron mover una bolita de poliestileno desde una superficie reflectante, sin tocarla.
Aunque no parezca importante, es un gran avance, pues el aparato es el precursor de lo que puede ser el futuro. Se podrían manipular elementos sin la necesidad de tocarlos o mover objetos de mayor tamaño.
¿Cómo funcionan estas "pinzas de sonido"?
De acuerdo con la explicación de los especialistas, está basado en leyes físicas de ondas de sonido. La vibración en conjunto es la que genera movimiento en el objeto (bolita) y logra hacerla suspender en el aire. Esto es posible gracias a una matriz hemisférica de transductores, de acuerdo con ADN 40.
El estudio fue publicado en Japanese Journal of Applied Physics y ahí se explica que el aparato debió generar u campo acústico en tercera dimensión para lograr su objetivo. Shota Kondo y Kan Okubo, investigadores del proyecto, creen que esto puede ser útil en otros campos en el futuro.
Por ahora la capacidad para sostener en el aire la bolita es por unos segundos, por lo que el camino aún es largo si desean que esto sea permanente y aplique con otro tipo de objetos.
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