Algo no debe estar del todo bien en México cuando al tiempo que las heroicas Madres Buscadoras descubrían el centro de exterminio ubicado como Rancho Izaguirre de Teuchitlán, en Jalisco, ocho jóvenes integrantes de la Pastoral Juvenil de Irapuato eran asesinados en Salamanca mientras se preparaban para participar en las misiones pastorales de Semana Santa o por solo citar un caso más, en el auditorio de la Universidad de Guadalajara se aprovechaba la celebración de un concierto masivo para rendir culto al mismísimo Nemesio Oceguera El Mencho, líder del Cártel Jalisco Nueva Generación…
…Y más cuando autoridades de los tres niveles de gobierno, al más alto nivel de Palacio de manera particularmente grave, se opta por negar hechos como los citados y tratar de “ocultar la verdad…” argumentando que su difusión no tiene más propósito que afectar políticamente su gestión, se apuesta por cancelar la no realización de acción alguna para investigar lo sucedido o atender a las víctimas o a sus familiares o, incomprensiblemente, se recurre al clásico “vamos a solicitar se investigue lo sucedido” con miras a ganar tiempo e impulsar acciones para que la sociedad deje de poner atención a la preocupante situación prevaleciente.
Inmerso en una crisis de seguridad nunca vista en las últimas décadas, el país debe enfrentar también el irracional embate del gobierno estadounidense del cuestionable Donald Trump que no sólo le exige resultados en la lucha contra la migración y el tráfico de toda suerte de enervantes, del letal fentanilo a su territorio de manera particular sino igualmente, tratar de lidiar con la (al parecer) compleja tarea de desmentir imputaciones que le exhiben como aliados de los cárteles del crimen organizado, situación ésta que se habría “normalizado” a todo lo largo y ancho del territorio desde la nefasta gestión de Andrés Manuel López Obrador.
Obligado entonces a avanzar en tales vías, nada parece más comprensible que la administración federal opte por tratar de disminuir la gravedad de la situación vía la aceptación de cuanta exigencia venga del vecino del norte y más allá como sucedió ya, por la entrega de una treintena de criminales presos en nuestro territorio sin que existiera petición alguna para ello.
Así las cosas…-
Asteriscos
· Evidencia más que clara de la cada vez más difícil situación económica que se enfrenta, la caída en el monto de las participaciones federales a los Estados que en febrero sumaron sólo 129,535 millones de pesos, 8% abajo en términos anuales, cuando se sabe que las mismas constituyen la principal fuente de ingresos para aquellos- Ufff…
Veámonos en 15 días con otro asunto De Naturaleza Política
POR ENRIQUE ARANDA
COLABORADOR
PAL