ACCESO LIBRE

Chiapas, la casa en desorden

Tímidamente, ayer se reportó el retorno de unas 200 personas a la comunidad de la Esperanza, municipio de Chenalhó, luego de que habían huido

OPINIÓN

·
Carlos Zúñiga / Acceso Libre / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Foto: Especial

Tímidamente, ayer se reportó el retorno de unas 200 personas a la comunidad de la Esperanza, municipio de Chenalhó, luego de que habían huido de la violencia de organizaciones criminales. Se trata de apenas un reducido grupo frente al monumental desafío que significa el estado de Chiapas por la extensión de su territorio, su frontera y lo fácil que es para los grupos delinquir ante la ausencia de estado de derecho.

“Están haciendo todo un escándalo”, reprochó el presidente Andrés Manuel López Obrador a medios y organizaciones civiles por la difusión del desplazamiento que obligó a familias enteras a llegar a pedir auxilio en Guatemala ante el miedo de sucumbir frente a los cárteles que operan en otra zona, la fronteriza. El temor de los desplazados no es infundado, ya que se contabilizan 500 homicidios dolosos solo en lo que va de 2024. Si bien es una tasa baja, son niveles no vistos,

En el discurso de la 4T, siempre existió la consigna de que el sur del país, castigado por el abandono gubernamental y presa de intereses económicos perversos, sería prioridad de esta administración. Son constancia de este discurso, las “grandes” obras que atraviesan la selva, la sierra y la montaña: el Tren Transístmico y el Tren Maya, además de la refinería de Dos Bocas.

Pero al mismo tiempo que una bonanza económica no vista antes llegaba, el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación también arribaron para controlar las rutas de droga y migrantes.

Más de 10 mil personas huyeron de la violencia en los municipios de La Concordia, Frontera Comalapa, Chicomuselo, Chapultenango, entre otros, de acuerdo con el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas. De la violencia al desplazamiento, se suma además, el ascenso nuevamente en la arena pública de la insurgencia zapatista.

El pasado 2 de agosto,  el Ejército Zapatista de Liberación Nacional, hizo la difusión de un nuevo escrito denominado  “¿Recomenzamos?” Firmado por el “Capitán Marcos”, en el que se criticó la violencia criminal, la llaga de los desplazados, y también, los megaproyectos de la 4T. Cómo de costumbre, el presidente López Obrador desacreditó la crítica, y la sumó  una vieja revancha, ya que desde su punto de vista, el EZLN no apoyó a su movimiento, e incluso señaló que llamaron a no votar por él.

Un par de días después, en un video, un grupo de personas que se identificaron como ex integrantes del EZLN, hicieron público que comenzarán a organizarse como un grupo de autodefensas en el municipio de Chenalhó con el objetivo de combatir a los grupos armados y paramilitares  que azotan a toda la región.

Chiapas es también el resultado de la ineptitud de sus gobiernos locales. Un reto que pretende superar el gobernador electo Eduardo Ramírez, quien no ha dudado en reconocer el problema y señalar a los responsables. Actitud muy diferente a la de López Obrador, que será un habitante más de ese estado, según ha dicho, a partir de su salida en octubre.

POR CARLOS ZÚÑIGA PÉREZ

COLABORADOR

@CARLOSZUP

MAAZ