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Gasto electoral: recortes inminentes

Las instituciones y funcionarios presupuestan y exigen como si la situación del tesoro público fuera diferente y superavitaria

Gasto electoral: recortes inminentes
Eduardo R. Huchim / Omnia / Opinión El Heraldo de México Foto: EL Heraldo de México

En estos días en que se estudia y discute el Presupuesto federal, salta a la vista una realidad: los recursos son insuficientes, a pesar del previsible déficit. La necesidad de una reforma fiscal, fincada en la progresividad, está a la vista. La presidenta Claudia Sheinbaum la ha descartado, pero su pertinencia muy probablemente crecerá en los próximos años.

Mientras tanto, las instituciones y funcionarios presupuestan y exigen como si la situación del tesoro público fuera diferente y superavitaria. Entre esas instituciones y funcionarios que parecen pensar así, a juzgar por sus proyectos de presupuestos, figuran los consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE) y los magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF). Es previsible que sus proyectos, como lo anticipó el diputado Ricardo Monreal, reciban recortes importantes, sobre todo en el caso del INE.

Es evidente la desmesura de los proyectos presupuestales de INE y TEPJF, actualmente en revisión en la Cámara de Diputados. El presupuesto que el INE ha solicitado para la elección judicial, por 13 mil 205 millones de pesos (números redondos), es el rubro que más ha llamado la atención porque ese monto supera el costo de las elecciones federales de 2024 (presidencial y legislativas), que ascendió a 8 mil 802 millones.

A la cifra judicial hay que agregarle 15 mil 295 millones de pesos de presupuesto ordinario del INE y 4 mil 620 mdp destinados a una eventual consulta popular (seguramente esta partida será la primera en ser recortada), para un total de 33 mil 120 millones. Si a esta cifra se le añade el financiamiento público a los partidos (no lo gasta el INE, pero sí forma parte de su presupuesto) por 7 mil 354 mdp, se llega a un gran total de 40 mil 474 mdp.

¿Necesita todo ese dinero el Instituto? Muchos creemos que no, en particular de cara a una tendencia del INE, no de ahora sino de lustros atrás, a sobrepresupuestar. Es sabido que las áreas del Instituto suelen añadir lo que podría llamarse “colchones de protección” ante el temor de quedarse cortos a la hora de afrontar los costos reales. El problema es que, al sumar esos colchones, resulta un king size enorme.

Además, en círculos cercanos al INE se habla de presuntas prácticas de corrupción y supuestas compras a sobreprecio. ¿Son esos rumores fundados o producto de la confrontación entre los dos bloques que persisten en el INE? Chi lo sa, pero lo cierto es que, infundadas o no, tales versiones recorren los pasillos de las instalaciones de Tlalpan y Periférico.

Y por lo que hace al TEPJF, su ruta presupuestal es semejante a la del INE, con matices quizá peores. Apunto un dato: en 2024 los magistrados ganan 201 mil 868 pesos mensuales y, además reciben cerca de medio millón por concepto de aguinaldo y prima vacacional (445 mil 465 pesos). ¿Le parece mucho? Pues aún hay más: por concepto de “pago por riesgo”, tienen 382 mil 396 pesos adicionales.

LOS EXCESOS DEL TRIBUNAL

El presupuesto solicitado por la Sala Superior del TEPJF está claramente excedido y revela la falta de una conciencia de austeridad. El presupuesto solicitado asciende a casi 4 mil millones de pesos (3,960 millones) en números redondos y representa uno de los más altos en la historia del tribunal.

El monto es superior al gasto de otros años en que hubo un alto número de litigios. Comparado con el presupuesto de 2024 (3,622 millones), el de 2025 representa un aumento de 9.31% nominal y de 5.21% en términos reales (con 3.3 de inflación anual y deflactor del PIB de 3.9% para 2025, cálculo revisado para esta columna por la maestra en Finanzas Laura Alicia Martínez González).

 Es decir, el TEPJF pide más dinero para 2025, cuando se elegirán unos 2,340 cargos (881 ministros, magistrados y jueces, más 1,459 alcaldías, sindicaturas y regidurías en Durango y Veracruz), mientras en 2024 fueron elegidos una presidenta, 500 diputaciones, 128 senadurías, 9 gubernaturas y más de 19 mil puestos locales adicionales. Dicho de otro modo, en 2024 se eligieron alrededor de 8.5 veces más cargos que los de 2025, pero para el próximo año se piden 338 millones más. Así la desmesura presupuestal del TEPJF.

En el rubro salarial, capítulo 1000, servicios personales, el proyecto de presupuesto prevé 3 mil 323 millones de pesos, superior en cerca de 8% a 2024, pero desdeña, con interpretaciones amañadas de la normatividad, la restricción constitucional ya vigente, en el sentido de que las magistraturas electorales no podrán ganar más que la Presidenta de la República.

Tampoco se toma en cuenta que de la administración del TEPJF se encargará un nuevo órgano previsto en la reforma judicial. Es de esperarse que este órgano, junto con el disciplinario, ponga fin a los ascensos injustificados, la asignación discrecional de contratos diversos, el uso de dinero público para fines personales incluso domésticos, todo un conjunto de vicios y malas prácticas que son comunes en una institución a la que le sobra dinero.

Precisión: En la columna Omnia de la semana pasada, suprimí inadvertidamente dos palabras y apareció que Morena domina “los tres poderes federales”. Debió decir “dos de los tres poderes federales”. Vale.

POR EDUARDO R. HUCHIM 

@EDUARDORHUCHIM

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