ANECDATARIO

"Grito de guerra"

Lo que aparentaba ser la directa interpretación de un poderoso y contundente mensaje- siendo la absoluta favorita de la audiencia- la dejó totalmente fuera de la jugada

OPINIÓN

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Atala Sarmiento / AnecdATArio / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: FOTO: Especial

Se levanta del suelo enfundada en una ceñida tela color piel que delinea las dimensiones reales de su cuerpo y se manifiesta al compás de su canción Ay Mamá: “No sé por qué dan tanto miedo nuestras tetas, sin ellas no habría humanidad, ni habría belleza”.

Es Rigoberta Bandini, la artista catalana que obtuvo el segundo lugar en el festival de Benidrom y con ello la imposibilidad de representar a España en el concurso de Eurovisión.

Lo que aparentaba ser la directa interpretación de un poderoso y contundente mensaje- siendo la absoluta favorita de la audiencia- la dejó totalmente fuera de la jugada.

Parece un clásico evento de censura como cuando en las redes sociales son eliminados aquellos posteos en los que quedan al descubierto los pechos femeninos.

El escandalizarse ante pezones de mujeres y prohibir su exposición es una tradición añeja.

En la época de los egipcios hombres y mujeres solían ir por la vida con el torso al desnudo, solo cubriendo la parte inferior del cuerpo, costumbre que se replicó en la era de griegos y romanos.

Durante el siglo XV, aún en la época del arte bizantino, era muy común ver pinturas de la llamada Virgen de la leche que exponía a María amamantando a Jesús con el pecho totalmente al descubierto, hasta que la inquisición consideró este tipo de arte como algo impuro y dejaron de hacerse estas obras. En qué momento María, que era pura y casta, se convirtió en una mujer sexual e impúdica.

En el siglo XVI, con el arte barroco, las devotas comienzan a sentir bochornos ante las sensuales imágenes de santos, mártires y el elenco entero de la corte celestial expuestos con cuerpos esculturales semidesnudos y mucho sexappeal. Los párrocos empiezan a retirar las obras de sus iglesias para evitar pensamientos impuros en sus incondicionales.

En 1517 la labor de Martin Lutero dio lugar a la fractura de la iglesia dividiéndose en protestantes y cristianos y es a partir de entonces que comienza a enraizarse el puritanismo y a convertir a la mujer en un objeto de tentación diferenciado del hombre.

Pero no siempre los pezones de las mujeres fueron un asunto inmoral. Durante un tiempo las muñecas o los tobillos eran los supuestos provocadores de excitación masculina. Por eso se inventó la manga y la falda larga.

La estocada final la dio la Reina Victoria quien añadió guantes y convirtió al corsé en un elemento de tortura que impedía hasta la movilidad.

Han sido siglos de una arraigada percepción sexualizada sobre el cuerpo femenino a diferencia del masculino. Lo bueno es que haya voces valientes como la de Rigoberta que estén dispuestas, aunque sea solo por una noche, a intentar cambiar dicha apreciación.

Su logro no era ganar el concurso, sino convertir su tema -como lo hizo en el escenario- en un auténtico grito de guerra

POR ATALA SARMIENTO
COLUMNAS.ESCENA@HERALDODEMEXICO.COM.MX
@ATASARMI

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