Vieron a Herrera
Más de cinco horas duró la estancia de las y los gobernadores electos de Morena en Palacio Nacional. Nos dicen que, tras la comida con el Presidente, se reunieron con el secretario de Hacienda, Arturo Herrera, ante quien expusieron sus necesidades presupuestales. Por supuesto, le desearon suerte en su nueva encomienda en el Banco de México.
Durazo, el primero
Todo indica que el gobernador electo de Sonora, Alfonso Durazo, se perfila para ser el primero en todo. Hace unos días, antes que nadie, se reunió en privado con el presidente López Obrador, y ayer fue el primero en llegar a Palacio Nacional para la comida que ofreció el titular del Ejecutivo Federal a los 11 mandatarios electos de Morena. Ahí la lleva.
Llegó preparado
Por cierto, quien llegó bastante preparado a la comida con el presidente López Obrador, fue David Monreal, próximo gobernador de Zacatecas. Llevó un cuadernillo engargolado, que parecía incluir datos y estadísticas. Para él, la reunión no fue un mero evento social, sino el primer acercamiento para explicar la situación en la que se encuentra la entidad.
El futuro de Batres
Incierto es el futuro cercano del senador Martí Batres. Unos lo perfilan para la dirigencia de Morena en la CDMX, otros a la secretaría de Gobierno capitalino, pero lo cierto es que nada hay decidido al respecto. Unos más refieren que es mejor dejarlo en el Senado, donde lidera al grupo más combativo. El caso es que le ven tamaños para ocupar varias carteras.
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Le llovió a Silvano
La caballería de Morena le cayó encima al gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles, por ligar a ese partido con el crimen organizado. El presidente López Obrador le pidió probar sus dichos; el líder morenista, Mario Delgado, le advirtió que puede ir a la cárcel, y el gobernador entrante, Alfredo Ramírez Bedolla lo acusó de mal gobernar.
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