SILBATAZO INICIAL

Y la desafiliación, ¿pa’ cuándo?

La plaza de San Luis Potosí se ha visto inmersa en diversas situaciones violentas, por lo que la Liga MX debe tomar medidas ejemplares

OPINIÓN

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José Eduardo Iga / Silbatazo inicial / Opinión El Heraldo de México

Ya son repetidos los episodios desenfrenados de la afición de San Luis Potosí desde que el Atlético de Madrid fincó sus esperanzas de expansión en la liga mexicana. Lo endeble del sistema de competencia que ha derivado en el peor torneo de la historia en cuanto a goles anotados, se comienza a manifestar también en lo blanda de las normas y sanciones para quienes incurren en actos violentos. “Con dinero baila el perro”, afirma el refrán popular, y aunque eso nunca ha sido secreto en México, hablamos de situaciones que podrían cobrar vidas si no se toman cartas en el asunto.

Acudir al Estadio Alfonso Lastras en plan familiarya comienza a ser tarea complicada, algo inadmisible para un espectáculo de esparcimiento social y que no deja de ser un simple juego; como su palabra lo denota: diversión. La entidad potosina es la duodécima más violenta en el país y aparentemente ello se refleja en los alrededores de su inmueble e incluso dentro de él, donde son varios ya los días sombríos.

En este torneo van dos cotejos donde se presenta la violencia. El más reciente se dio entre aficionados del América y los ya mencionados sanluisinos. El saldo, varios lesionados detenidos, y un bebé que pudo llevarla sin deberla ni temerla. Su padre estaba involucrado en la bronca con él en brazos. Como si de una guerra se tratase, ambos grupos de animación se preparaban con piedras, botellas y palos en la previa. Hace algunas semanas, lo mismo, pero ahora frente a fanáticos de Tigres. Tras la goleada a domicilio propinada por los de Miguel Herrera, hubo trifulca donde incluso se escucharon detonaciones, que luego resultaron ser cohetones de las barras.

En la Jornada 2 ante Querétaro, se dio en varias ocasiones el grito homofóbico y se les impuso una multa y aviso de veto.  Además, aventaron proyectiles al cancerbero uruguayo de la escuadra visitante.

Cómo olvidar aquella riña en tribunas del año 2019, en el llamado clásico del centro, también contra Gallos Blancos, en que incluso los niños huían al campo atemorizados. El castigo: multa y dos partidos sin público.

Sumémosle los insultos a Maradona en la final de ascenso, donde estuvo cerca de llegar a los golpes con un aficionado y la balacera en 2016 fuera de su estadio. Por lo menos son cinco situaciones deplorables que caben en este espacio. Y me cuestiono. Así de sencillo. Se debería vetar el ingreso a todos los grupos de animación que hayan incurrido en violencia. Si trajeron el futbol, que los colchoneros emulen también el sistema europeo para que los aficionados conflictivos no vuelvan a pisar ningún estadio en su vida. De no lograrse, con respeto para la fanaticada que se comporta bien, San Luis no debería ser más equipo de Primera. Es más, ni profesional, en ningún circuito avalado por la Federación azteca de futbol. Claro.  Ya la ridiculez de la Liga MX con sus sanciones vomitivas es punto y aparte. Multas, un veto, y nada más. Ridículo.

POR JOSÉ EDUARDO IGA 
TITULAR DE ARREBATO DEPORTIVO EN EL HERALDO RADIO TORREÓN 
TWITTER: @JOSE_IGA

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