Una de las críticas al gobierno federal en el manejo de la crisis sanitaria es la ausencia de apoyos al sector productivo cuando la economía está en recesión.
El presidente Andrés Manuel López Obrador ha dicho en diversos foros nacionales e internaciones que su gobierno no seguirá las recetas del pasado, y la mala noticia es que la pandemia dista mucho de quedar atrás.
“A rascarse con sus propias uñas”, dijo en su momento el jefe del ejecutivo, y para la aviación comercial el resultado ha sido que Interjet está en huelga herida de muerte, y Aeromexico ha decidido cancelar los contratos colectivos con pilotos y sobrecargos.
El desplome de la aviación comercial no es privativo de México y países como Estados Unidos y Alemania, entre otros, han decidido apoyar a sus líneas aéreas por ser un sector estratégico para las comunicaciones de un país.
Usted dirá, es un lujo que México no puede darse habiendo millones de pobres, pero no deja de ser cuestionable.
En 2020 Aeromexico hizo esfuerzos importantes para sobrevivir ante la caída de más de 60 por ciento en sus ingresos con la pandemia. Ha recortado su flota, despedido a trabajadores y redujo sus gastos, pero no ha sido suficiente para convencer a los
inversionistas de Apollo Group para acceder a la última parte de un crédito por mil millones de dólares de los cuales ya ha recibido 370 millones de dólares.
De ahí la mano dura de Andrés Conesa Labastida, mandamás de Aeromexico, porque sin ese crédito tendrá que sortear lo que falta de la crisis con su limitada tesorería.
Ahora el destino de Aeromexico será responsabilidad de la justicia laboral, aunque algunos ven la cancelación de contratos colectivos como la última llamada para negociar con los trabajadores.
Si las cosas se radicalizan en los tribunales el fantasma de la quiebra rondará a Aeromexico, pero por otro lado, ajustarse a las condiciones fijadas por Apollo Group llevará a una caída importante en los ingresos de pilotos y sobrecargos por varios años.
La 4T no ha dimensionado la gravedad de un escenario de líneas aéreas moribundas, algo que tendrá impacto en otros sectores económicos, para no ir tan lejos piense en el turismo.
La ruta del dinero
La firma financiera AlphaCredit, que dirigen Augusto Álvarez y José Luis Orozco acaba de concretar de manera exitosa un financiamiento por 25 millones de dólares con el banco de inversión Morgan Stanley. Lo recursos se utilizarán para robustecer sus servicios financieros en América Latina y posicionarse como de las mejores opciones en el rubro.
Cabe destacar que su presencia no sólo esta en territorio nacional con más de 68 sucursales, también está bien posicionada en Colombia. AlphaCredit, es una empresa de tecnología especializa en el otorgamiento de créditos al consumo y financiamiento a las pequeñas y medianas empresas. Ha desembolsado más de mil millones de dólares para los sectores desatendidos por la banca tradicional, mediante sus marcas Bontu, Crediamigo, Total Credit y Vive Créditos; y ha otorgado más de 600,000 créditos a más de 365,000 clientes, de forma rápida, sencilla y confiable.
POR ROGELIO VARELA
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