Al menos 166 marinos y militares de Estados Unidos ingresarán, con armas y municiones, a territorio mexicano entre marzo y mayo para preparar a las Fuerzas Armadas mexicanas en la infiltración a larga distancia, reconocimiento especial y captura de objetivos de valor estratégico, además de incrementar las capacidades de respuesta anfibia de las unidades operativas de la Armada de México en operaciones navales para la defensa del territorio marítimo y de la seguridad interior ante cualquier tipo de crisis.
La Comisión de Marina del Senado avaló una solicitud de la presidenta Claudia Sheinbaum para que el Senado permita el ingreso a territorio mexicano de 155 elementos de las Fuerzas de Infantería de Marina del Comando Norte del Ejército de los Estados Unidos, a efecto de que participen en el “Ejercicio Bilateral Anfibio FÉNIX 2025“, que se llevará a cabo en tres fases en las instalaciones del Centro Regional de Adiestramiento Número Cuatro “CENAREG-4” de la Armada de México, ubicado en Isla Santa Margarita, Baja California Sur.
Los marinos estadounidenses permanecerán en el país del 24 de marzo al 23 de abril e ingresarán con cargamento orgánico, municiones, vehículos y equipo especial.

¿Cuál es el objetivo del entrenamiento?
El objetivo de esos ejercicios es aumentar las capacidades de respuesta de las unidades operativas de la Armada de México en operaciones navales para la defensa del territorio marítimo y de la seguridad interior.
Asimismo, la presidenta Sheinbaum Pardo envió otro oficio para que el Senado pueda aprobar el ingreso de once militares de EU al territorio nacional, quienes participarán en la actividad de adiestramiento denominado “Entrenamiento de Ejercicios Combinados Conjuntos (JCET)“, a realizarse del 7 de abril al 3 de mayo de 2025, en el Centro de Adiestramiento regional de la I Región Militar (San Miguel de los Jagüeyes, Estado de México) y del 4 al 15 de mayo de 2025 en el Centro Nacional de Adiestramiento (Santa Gertrudis, Chihuahua).
El adiestramiento irá dirigido a personal de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) con el objetivo de mejorar la capacidad de planificación y ejecución de operaciones especiales, así como combinar las especialidades de caída libre militar y francotiradores de fuerzas especiales, mediante el desarrollo de ejercicios conjuntos enfocados en la infiltración a larga distancia, reconocimiento especial y captura de objetivos de valor estratégico.
En este caso, de ser aprobado por el Senado, ingresarán a territorio nacional una delegación conformada por 11 elementos del séptimo Grupo de Fuerzas Especiales del Comando de Operaciones Especiales Norte del Ejército de Estados Unidos. La delegación ingresaría a bordo de una aeronave, C-130 Hércules de la Fuerza Área de Estados Unidos, aterrizando el 7 de abril en la Base Área de Santa Lucía y retornando el 15 de mayo de la Base aérea número 11 de Santa Gertrudis, Chihuahua.