El exgobernador de Puebla, Marino Marín Torres, dejó el penal de El Altiplano, ubicado en Almoloya de Juárez, Estado de México, rumbo a prisión domiciliaria en su casa en Puebla, tras tres días de incertidumbre y versiones encontradas sobre su ubicación.
Fue después de las 11:31 horas del 13 de agosto que el político recobró su libertad a bordo de una unidad de la Guardia Nacional que estuvo resguardada por otras tres, con más de 20 elementos.
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El dispositivo de seguridad comenzó a las 10:34 horas, tiempo en el que los elementos de la Guardia Nacional asignados a esta tarea estuvieron esperando para hacer el traslado a Puebla.
Cambian medida cautelar en contra de Mario Marín
El 10 de agosto, la juez tercera de Distrito con sede en Quintana Roo, modificó la medida cautelar en contra de Marín Torres, que pasó a prisión domiciliaria con el pago de una multa de 100 mil pesos y la colocación de brazalete, ante el proceso por los delitos de tortura y protección de redes de trata infantil ante el caso de la periodista Lydia Cacho.
Aunque la determinación de que recobrara su libertad fue acatada por las autoridades penitenciarias, ésta se hizo efectiva tres días después y luego de que la jueza amonestó al director del Cefereso 1, quien informó que realizaron solicitudes a la Fiscalía General de la República y las 32 fiscalías estatales sobre posibles órdenes de aprehensión.
En dicho lapso, hubo versiones encontradas que el político ya había abandonado la cárcel y ya estaba de regreso en su casa. Mario Marín estuvo en una celda del penal del Altiplano, después de que fuera detenido el 3 de febrero del 2021 por elementos de la Fiscalía General de la República en Acapulco, Guerrero e ingresado y encarcelado en Cancún, Quintana Roo.
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