Migrantes que avanzan en caravana por el sur de Chiapas, protestaron este viernes en exigencia de permisos de libre tránsito por México. Los extranjeros, varados ahora en la localidad de Pijijiapan, a unos 150 kilómetros de su punto de partida en Tapachula, el pasado 6 de diciembre, llamaron al gobierno de Claudia Sheinbaum para que les permitan tomar autobuses o algún medio de transporte y movilizarse hacia el centro del país, donde buscarían permisos por parte del Instituto Nacional de Migración (Inami).
Los más de mil migrantes señalaron que llevan caminando 14 días, en condiciones adversas, con altas temperaturas y el acecho de grupos criminales que han secuestrado a varios de los integrantes de esta caravana. Con pancartas, los viajeros internacionales apuntaron que ya no pueden caminar más, debido al agotamiento, los cuadros de deshidratación, la falta de agua y alimentos que les impide continuar en la ruta .
“Presidenta Claudia, queremos un poco de misericordia para con los emigrantes”, rezaba la pancarta de una menor de origen hondureño, que viaja con su madre en este éxodo.
Según el activista Luis García Villagrán, que ha dirigido a varias caravanas del sur de México, las autoridades mexicanas se niegan entregar las formas migratorias múltiples para los solicitantes, engañándolos con traslados a otras partes del país, cuando realidad se trata de una política de dispersión con la finalidad de que no lleguen a la frontera norte.
“Es un engaño lo que hace el gobierno, los dispersan a lo largo y ancho del territorio nacional, los mandan a Acapulco, a Villahermosa, a cualquier parte que no sea la frontera norte, porque allí es a donde no quieren que llegue ante la presión de Estados Unidos”, aseveró.
Dos caravanas se unirán con los migrantes
Mientras tanto, kilómetros atrás, en el municipio de Villa Comaltitlán, unos mil 500 migrantes avanzan hacia el punto donde se encuentra el otro grupo que este viernes protestó. La intención es que ambas caravanas puedan reunirse y lograr mayor número de migrantes.
Esto, a decir de los propios extranjeros, presionaría más a las autoridades mexicanas a entregarles dichos permisos para dispersar un grupo grande. La unión de ambos contingentes, podría darse el próximo domingo y reanudar su marcha en un solo grupo a partir del lunes con rumbo hacia los límites con Oaxaca.
Desde el anuncio de la victoria de Donald Trump como nuevo presidente de Estados Unidos, al menos ocho caravanas han salido desde Tapachula con un estimado de 12 mil migrantes en todas estas movilizaciones, según una estimación del Centro de Dignificación Humana. Se prevé que el próximo 1 de enero, en los primeros minutos del 2025, un nuevo contingente salga desde la frontera con Guatemala para intentar llegar a la Ciudad de México.
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