COXSACKIE

¿Qué es el Coxsackie? Todo lo que debes saber sobre este virus que afecta a los niños

La población mexicana se encuentra en alerta y por lo cual han surgido dudas sobre el peligro que representa contagiarse con este patógeno

NACIONAL

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El Coxsacki es un virus que pertenece a la familia "Picornaviridae".Créditos: Pixabay

Las autoridades del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) han confirmado tres casos de Coxsackie en niños de la guardería “Bombinos Palmarés” del estado de Querétaro, y otros más en guarderías del instituto en el municipio de Metepec, Estado de México.

Ante esta situación, la población mexicana se encuentra en alerta y por lo cual han surgido dudas sobre el peligro que representa contagiarse con este patógeno. Para acabar con estas interrogantes, a continuación te decimos todo lo que debes saber del Coxsackie.

¿Qué es el Coxsackie y cómo se contagia este virus?

El Coxsackie A16, es un virus perteneciente a la familia Picornaviridae de los enterovirus, misma que incluye a los virus de poliomielitis y hepatitis “A”.

Este tipo de virus viven en el tracto digestivo de los afectados; también es conocido como Enfermedad Boca Mano Pie. Este virus se manifiesta principalmente con un salpullido rojo en las manos y pies, así como llagas en la boca, los labios, las encías, lengua y paladar.

Se manifiesta principalmente con un salpullido en las manos y así como llagas en la boca, los labios, las encías, lengua y paladar. Foto: Especial

El Coxsackie se presenta en bebés, niños de entre 5 y 19 años y en algunas ocasiones en adolescentes y adultos jóvenes. Este virus puede estar presente en la saliva, mucosidad, secreciones nasales y en el líquido que sale de las ampollas.

Este virus se puede contagiar de persona a persona por medio del contacto con las manos sucias, secreciones de la nariz, garganta, ampollas y heces de los infectados; la enfermedad se transmite con mayor frecuencia durante la primera semana tras el contagio de una persona.

¿Cuáles son los síntomas del virus?

Además de los síntomas anteriores, también se puede presentar fiebre, dolor de garganta, malestar general y falta de apetito.

El contagio se puede evitar con el lavado frecuente de las manos con jabón, además de compartir utensilios, objetos o alimentos. También se debe desinfectar objetos que estuvieron en contacto con algún contagiado, además de evitar saludar de beso y cubrirse la boca con el antebrazo al toser.

Actualmente, no existe un tratamiento específico para la enfermedad, pues se sabe que la enfermedad se cura por sí sola en pocos días, aunque se recomienda mantenerse hidratado y la ingesta de bebidas ácidas y picantes.

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