La madrugada de este miércoles se registró un enfrentamiento entre dos grupos de cooperativistas de la Cementera Cruz Azul, en los accesos de la entrega industrial de la planta en Jasso, ubicada en el municipio de Tula, en el murieron ocho personas, 11 más resultaron lesionadas y nueve fueron detenidas.
De acuerdo con el reporte de la Secretaría de Seguridad Pública estatal (SSPH), la trifulca ocurrió alrededor de las 04:00 horas, cuando cerca de 500 sujetos, a bordo de 15 autobuses, intentaron ingresar a la planta cementera, por lo que otro grupo de cerca de 500 trabajadores repelieron a los agresores, lo que ocasionó un choque en el que murieron ocho personas por detonaciones de armas de fuego.
Al sitio arribaron elementos de las policías estatal y municipal que acordonaron la zona; sin embargo, minutos antes los agresores escaparon y las autoridades localizaron uno de los autobuses en el municipio de Atotonilco de Tula, cuando pretendía regresar, y por lo cual fueron detenidas nueve personas que quedaron a disposición del Ministerio Público.
En total fueron quemados 10 vehículos y una motocicleta, además de que le prendieron fuego a la subestación eléctrica de la cementera, y por lo cual la planta ha detenido sus operaciones de forma temporal.
Al respecto, el gobernador de Hidalgo, Omar Fayad Meneses, confirmó que el sitio fue resguardado por las autoridades estatales y anunció que la Secretaría de Gobierno estatal abrirá una mesa de diálogo para la resolución del conflicto y se prevengan más incidentes similares.
Por su parte, la Procuraduría General de Justicia abrió la carpeta de investigación para deslindar responsabilidades, por lo que continuarán las indagatorias correspondientes.
El conflicto de la cementera Cruz Azul se remonta a la disputa que mantienen el grupo que encabeza Federico Sarabia y José Antonio Marín, quienes se han acusado mutuamente de tráfico de influencias, corrupción y venta ilegal de cemento; sin embargo, el grupo de Sarabia se dijo el administrador del mismo al asegurar que cuentan con un aval legal de un actuario del Poder Judicial del Estado de Hidalgo.
Asimismo, el pasado 15 de diciembre ocurrió un enfrentamiento entre ambas partes, pues el grupo de José Antonio Marín intentaba ingresar al inmueble de Tula, por lo que fue impedido por trabajadores de la cooperativa y familiares cercanos al grupo de Sarabia, y el conflicto fue resuelto con la intervención de la policía estatal.
Sarabia es identificado con el grupo de Billy Álvarez, el ex presidente de la cooperativa y considerado líder de la cementera durante tres décadas, quien está prófugo de la justicia, luego de que existe una orden de aprehensión por lavado de dinero y delincuencia organizada desde 2020; incluso, es buscado por la Interpol en 195 países.
En tanto, la Cooperativa Cruz Azul, encabezada por Marín, sostuvo que no provocaron las agresiones y por ello se han mantenido en el ámbito legal con respecto a la restitución de funciones, por lo que llamó a las autoridades estatales a resolver este conflicto, mientras que el Consejo de Administración y Vigilancia impulsado por Sarabia, acusó al grupo contrario de intentar tomar el control por la fuerza como lo han buscado en cuatro ocasiones sin éxito y por lo cual fue asesinado el hijo de uno de los cooperativistas.
MAAZ